Los restos mortales del comediante mexicano Roberto Gómez Bolaños se encontraban el sábado a las instalaciones de Televisa en la ciudad de México, donde la compañía para la que trabajó toda su vida le ofreció un primer homenaje: una misa privada.
En torno a 400 personas, entre las que se encontraban los ejecutivos de la televisora y numerosos artistas, productores y elenco vario, participaron en una ceremonia «sobria» que tuvo lugar ya de noche, indicó un trabajador de la compañía que no tiene permitido hablar con la prensa.
Ningún político acudió porque era una misa «para gente de la casa», añadió. Tampoco estuvo presente la primera dama Angélica Rivera pese a sus vínculos durante años con Televisa.
Entre los presentes estaban los actores que formaron el elenco del programa «El Chavo del 8» como Carlos Villagrán y Édgar Vivar, así como el comediante Eugenio Derbez.
Medios habían informado que Villagrán tenía prohibido acudir a los homenajes de Chespirito. Finalmente esto no ocurrió.
El acto masivo está previsto para este domingo. La televisora prepara un homenaje público en el estadio Azteca, un recinto con capacidad para más de 100.000 personas, donde se suelen realizar partidos de fútbol del Club América, que era el favorito del humorista, y también espectáculos artísticos.