El presidente de la República, Rafael Correa, dijo que el «2014 será un año histórico porque será el fin del hacinamiento en las cárceles».
Las expresiones del mandatario se dieron durante el Enlace Ciudadano Nº 353, efectuado el pasado sábado en el estadio de Liga Deportiva Hierba Buena de La Argelia, ubicado en el sur de Quito.
Correa se refirió, entre otros temas, a los nuevos centros de rehabilitación social. «Hoy se ve una luz al final del túnel con la puesta en funcionamiento del nuevo Centro de Privación de la Libertad Regional del Guayas, que posee una moderna infraestructura y equipos de vigilancia de última tecnología», destacó el presidente.
Luego de recordar que a partir del 2008, formalmente con la nueva Constitución, las cárceles pasaron a manos del Gobierno central, antes a cargo de la Fiscalía, expresó que en la práctica esto se dio en el 2009, un camino de malas decisiones, obstáculos y demoras.
Agregó que los intentos de fuga registrados en los últimos días se deben a la resistencia a las nuevas cárceles que hoy «rompen toda una estructura de dominio».
El mandatario indicó que se trabaja intensamente para construir cárceles decentes y dignas en las provincias de Guayas, Cotopaxi y Azuay, con una capacidad para más de 15 mil internos que habitarán en las mejores condiciones en América Latina.
Según un informe de la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos (Cedhu), con base en estadísticas del Ministerio de Justicia, hasta octubre pasado en el país había 56 cárceles con capacidad para 12.338 personas, cuando la población carcelaria es de 24.589.
Celeridad
Sobre el tema del hacinamiento en las cárceles del país, una investigación de la Fundación para el Debido Proceso cita entre las causas un incremento de personas encarceladas sin sentencia debido a la falta de celeridad en la justicia y, sobre todo, a la poca utilización de medidas alternativas a la prisión.