El presidente del Ecuador, Rafael Correa, se reunió este martes en el Kremlin con el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin, y el primer ministro, Dmitri Medvédev, para impulsar la cooperación entre ambos países mediante acuerdos bilaterales. Se suscribieron convenios para que Moscú financie con 193 millones de dólares el proyecto de construcción de la central termo-eléctrica Termogas en Machala (El Oro), que tiene un costo de $230 millones y una capacidad instalada de 187 MW.
Rusia también cooperará en la construcción de los proyectos hidroeléctricos Cardenillo (596MW), ubicado en Morona Santiago, y Chontal (190MW), situado entre las provincias de Pichincha e Imbabura, por un total de 1200 millones de dólares.
El financiamiento de la construcción de los multipropósitos Coaque y Tahuín también serán contemplados en los acuerdos. El multipropósito Coaque está al sur de Pedernales (Manabí) y requiere una inversión de $98 millones, mientras que el multipropósito Tahuín situado en el cantón Arenillas (El Oro) requerida una inversión de $68 millones.
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Además, se firmaron convenios para que la empresa ferroviaria rusa realice estudios de factibilidad para desarrollar, en alguna ciudad de Ecuador, el tren como medio de transporte masivo.
En la reuninón, Putin dio la bienvenida a la comisión ecuatoriana y expresó sus intenciones de fortalecer los vínculos binacionales. Recordó que el comercio bilateral ha crecido un 10% en los últimos años llegando a un intercambio comercial que llega a los 1.500 millones de dólares. Estas cifras, dijo Putin, convierten a Ecuador como un «socio estratégico de Rusia en América Latina».
Correa, por su parte, expresó el interés ecuatoriano de intercambiar tecnología con Rusia y, sobre todo, conocer el trabajo científico de este país para replicarlo en la Ciudad del Conocimiento de Ecuador (Yachay).
También expuso a las autoridades rusas el incremento de los proyectos de exploración de gas en el Golfo de Guayaquil y de las reservas hidrocarburíferas que tiene Ecuador. Además, Correa felicitó a Putin por el «éxito diplomático» de su plan para el desarme químico de Siria y el arreglo pacífico del conflicto en el país árabe.