«Es necesario revisar el funcionamiento de las instituciones de la ONU, y en particular del Consejo de Seguridad», dijo la mandataria argentina Cristina Fernández durante su intervención en un debate ante el máximo órgano de decisión de Naciones Unidas presidido por su país.
Fernández aseguró que, terminada la Guerra Fría, la comunidad internacional debe «repensar» el funcionamiento de sus instituciones porque, según destacó, «los viejos métodos» no darán respuesta a la nueva realidad.
«Parece una obviedad pero muchas veces los miembros permanentes usan su derecho a veto para obstruir la verdadera resolución de conflictos», criticó la presidenta, en presencia de los representantes de esos cinco países: Estados Unidos, Rusia, Francia, China y Reino Unido.
También abogó por la búsqueda de consensos que no se basen en los intereses particulares de cada Estado y la adopción de resoluciones «por unanimidad».
«Son tan graves y tantos los problemas que atraviesa el mundo, que debemos repensar este organismo y diseñar nuevos instrumentos que nos permitan ser eficaces. El respeto de la sociedad global solo lo tendremos cuando demostremos que somos eficaces», subrayó.
Durante el debate, centrado en la cooperación entre la ONU y las organizaciones regionales para el mantenimiento de la paz, Fernández destacó la respuesta de América Latina a distintos conflictos a través de grupos como la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Esas organizaciones «han permitido la continuidad del sistema democrático en una región donde que no es una cuestión menor», destacó la presidenta argentina, quien dijo que América Latina es en la actualidad «una región de paz».
Fernández -quien aprovechó su discurso para volver a pedir a Reino Unido que se siente a conversar sobre la disputa por la soberanía de las islas Malvinas-, abogó por establecer regulaciones de carácter global para asegurar la soberanía de los estados y la privacidad de los ciudadanos, en referencia a los actos de espionaje por parte de las agencias de inteligencia de EE.UU. en América Latina.
Más temprano, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, destacó la importancia de «trabajar juntos para prevenir y manejar crisis» y recordó la «larga historia» de cooperación entre la ONU y organizaciones latinoamericanas en misiones para resolución de conflictos.
Ban y Fernández se reunieron hoy de forma previa a la sesión y discutieron la cuestión de las islas Malvinas, los incidentes que afectaron al vuelo del presidente boliviano, Evo Morales, el pasado dos de julio, cuando algunos países europeos le impidieran sobrevolar su espacio aéreo; así como la situación en Egipto y en Siria.