Los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina se convirtieron este lunes en padres de un niño que ocupará el tercer lugar en la línea de sucesión a la corona británica, según informó el Palacio de Kensington, su residencia oficial.
La duquesa dio a luz hoy en la sala privada «Lindo» del hospital St. Mary, en el centro de Londres, tras ser llevada esta mañana en coche al hospital desde el palacio de Kensington.
El bebé nació a las 4:24 horas de Londres (15:24 GMT) y pesó al nacer 3,8 kilos. Su nombre se anunciará más adelante pero las quinielas apuntan a que se llamará George o James.
«Su Alteza Real y su hijo están bien y permanecerán esta noche en el hospital», dijo la Casa Real británica, que dejó a un lado la tradición y anunció el nacimiento en una nota de prensa.
«La Reina, el duque de Edimburgo, el príncipe de Gales, la duquesa de Cornualles, el príncipe Enrique y miembros de ambas familias han sido informados y están encantados con la noticia», añadió.
Tras el anuncio, la multitud estalló de júbilo a las puertas del hospital, donde decenas de curiosos permanecían apostados para esperar la noticia.