El presidente de la República, Rafael Correa, firmó ayer el Decreto Ejecutivo que crea la comisión que llevará a cabo «una investigación profunda y objetiva» sobre los hechos ocurridos el 30 de septiembre de 2010 (30-S), en especial sobre sus autores intelectuales y materiales.
La comisión está conformada por los ciudadanos Oscar Bonilla Soria, Diego Guzmán Espinosa y Carlos Baca Mancheno, este último quien la presidirá.
Los resultados de la investigación deberán ser puestos a consideración de la Fiscalía General del Estado, según detalla el decreto.
La comisión funcionará por seis meses, con posibilidad de extenderse hasta por igual plazo, y su gestión concluirá con la presentación de un informe al Jefe de Estado.
Sus miembros ejercerán el cargo de manera gratuita, sin perjuicio de que se les cubran los valores por viáticos, movilizaciones y otros que sean necesarios para el desempeño de sus funciones.
Para el cumplimiento de su cometido, la comisión tendrá libre acceso a toda la documentación que esté en poder de la Administración Pública Central e Institucional, pudiendo requerir, a nombre del Gobierno Nacional, declaraciones o información de cualquier persona para el esclarecimiento de la verdad.
También podrá solicitar la desclasificación de archivos, informes y documentos calificados como reservados o secretos.