«Una operación psicológica está dirigida desde Bogotá para dividir a las fuerzas revolucionarias, para debilitar la democracia de Venezuela, dirigida por perversas mentes dedicados a la guerra sucia, a la guerra psicológica contra la patria y han tomado al compañero Diosdado Cabello como objetivo», dijo Maduro.
El plan, del que no dio detalles, busca el «asesinato moral y ver si después pueden buscar el asesinato físico» de Cabello, afirmó, en un acto de exhibición de armas con las fuerzas militares en Aragua (norte). Maduro exhortó además a la Fuerza Armada a estar «alerta».»Salgamos al frente de cualquier campaña (…) enemiga, de destrucción moral contra hombres como Diosdado Cabello y contra el alto mando político y militar de la revolución», dijo.
Aseguró también que «aquel que cometa el error de tratar de entregar su patria y de mover fuerzas enemigas de la patria en el exterior se verá con las leyes venezolanas».
Las declaraciones se dan un día después de que Capriles, quien resultó perdedor en las presidenciales del 14 de abril por una diferencia de 1,49% de votos, se reuniera con Santos y congresistas colombianos, solicitándoles apoyo para que se cumpla una auditoría de las elecciones que impugnó al denunciar irregularidades.
Desde el miércoles la reunión entre Santos y Capriles había generado reacciones de Venezuela a través de Cabello y del canciller Elías Jaua, quien anunció que revisaría la participación que desde diciembre venía dando el país a los diálogos de paz entre Colombia y la guerrilla de las FARC en Cuba.
Cabello por su parte condenó la reunión entre el líder opositor y el presidente colombiano, y manifestó que se habría puesto «una bomba a las buenas relaciones». La canciller colombiana, María Ángela Holguín, aseguró que Santos tratará la reacción de Jaua y Cabello «de manera directa con el gobierno venezolano».
Como respuesta a la gira que líderes de la oposición venezolana han hecho por algunos países de la región, el miércoles representantes del oficialismo anunciaron que también harán un recorrido por algunas naciones, entre ellas Colombia, para que se conozca la versión del gobierno sobre la situación postelectoral en Venezuela.