La Cámara de Diputados inició ayer el debate del proyecto de ley de blanqueo de dólares impulsado por el Gobierno que ya fue aprobado por el Senado y que busca recuperar divisas fuera del sistema a través de un mecanismo que permitirá invertir en el sector energético y en el inmobiliario.
En representación del oficialismo, el diputado Roberto Feletti explicó que el objetivo de la iniciativa «es movilizar ahorros que hayan salido del circuito económico formal de la Argentina y reingresen para poner en valor y movilizar activos argentinos, sean muebles o inversiones en infraestructura, particularmente en hidrocarburos».
«El objetivo fundamental es lograr un shock de inversión sobre activos cuyo valor Argentina ha defendido e invitar a quienes por distintas razones retiraron esos fondos y los apliquen nuevamente a artículos que hoy tienen valor», añadió. El proyecto de blanqueo de divisas no declaradas autoriza al Ministerio de Economía a emitir el Bono Argentino de Ahorro para el Desarrollo Económico (Baade) y el Pagaré de Ahorro para el Desarrollo Económico que estarán denominados en dólares.
Los fondos recaudados en su emisión serán destinados, exclusivamente, a la financiación de proyectos de inversión pública en infraestructura e hidrocarburos. Asimismo, autoriza al Banco Central a emitir el Certificado de Depósito para Inversión (Cedin) en dólares, que será endosable, como un medio para la cancelación de obligaciones en la moneda norteamericana.
Feletti ponderó la política económica del Gobierno de defender el valor de esos activos y la intención de «mostrar que Argentina es un país en el cual vale la pena apostar y eso lo demuestran todos estos años de crecimiento». Aclaró que «el único beneficio» que otorga la ley «es el de exención impositiva» y que a partir del momento en que el dinero ingresa al circuito bancario formal «las instituciones financieras de Argentina deben aplicar la normativa de lavado de dinero, y registrar quién es el depositante».
Según el viceministro de Economía, Axel Kicillof, en Argentina hay $40.000 millones en manos de argentinos, y estimó que las tenencias en la divisa estadounidense se triplican en paraísos fiscales.
De esta forma, el país sudamericano sería el de mayor tenencia de dólares per cápita después de Estados Unidos, con $1.200, de acuerdo al funcionario.
Julio César Martínez, de la Unión Cívica Radical (UCR, oposición socialdemócrata, segunda fuerza en la Cámara), dijo que con la aprobación del proyecto se «está minando la confianza que tiene la economía para que no pase lo que está pasando con la fuga de capitales».
La socialista opositora Alicia Ciciliani adelantó que su bloque rechazará la propuesta por considerar que es una «política activa del Estado a favor de la industria de lavados de activos».