A un costo de 229 millones de dólares la contratista Odebrecht prepara el terreno donde será colocada la infraestructura de la nueva refinería del Pacífico Eloy Alfaro. Este es un espacio de 500 hectáreas, las obras, según el contrato, deben terminar en diciembre de 2014.
Los obreros y maquinarias trabajan las 24 horas del día, lo cual ha permitido acelerar los trabajos, arrojando un avance de obras de 21,44 por ciento a la fecha. «De seguir este ritmo podremos entregar la base de la infraestructura sobre donde se colocará la refinería mucho antes de lo proyectado», dijo Henry Ocando, administrador del movimiento de tierras.
El sitio elegido para edificar la nueva refinería con capacidad de procesar 330.000 barriles de petróleo por día es la zona conocida como El Aromo, cerca a la ciudad de Manta (provincia de Manabí). El lugar es un área no explotada por los agricultores, con abundante vegetación.
La contratista debe realizar una remoción de cerca de 50 millones de metros cúbicos de tierra. En esta etapa se trabaja casi sin contratiempos, solo cuando llueve las maquinarias se paralizan por prevención a accidentes. El suelo se convierte en «jabonoso», señaló Rodrigo Intriago, técnico de seguridad industrial de la obra.
«El lugar es ideal para la refinería», precisó Bismarck Andrade, gerente Técnico de la obra. Explicó que la zona de El Aromo tiene en el año un promedio de 5 grados centígrados menos que en otras zonas de la costa. Es un área que permanece nublada y las personas tienen la necesidad de abrigarse en las noches.
Indicó que en una refinería hay unos 2 grados más de temperatura por los calderos y el sistema usado en el proceso de producción de los derivados. Aquí el clima es más frío y estratégico por cercanía al mar.
La refinería del Pacífico tiene un área de influencia con las comunidades donde se trabaja en la dotación de obras de infraestructura, capacitación, acciones que conlleven al mejoramiento de la calidad de vida y prevención del medio ambiente, anotó.
En este último punto reveló que el área de intervención para asentar la planta es de 500 hectáreas y que hay una zona de amortiguamiento y protección de 3.300 hectáreas junto a la refinería. En ese lugar habrán obras de reforestación con lo cual se aminora el área de impacto ambiental, señaló el gerente técnico de la obra.
Aclaró que los trabajos desarrollados pertenecen a la primera etapa que busca adecuar toda la infraestructura para soportar los equipos que tienen más de 1.000 toneladas de peso. La segunda etapa tiene un costo estimado entre 10 a 12 mil millones de dólares.
La nueva refinería ha traído expectativas laborales entre los lugareños, quienes están atentos a los llamados de trabajar. Hay estimaciones en el tope máximo de instalación de la planta se requerirán 22.000 trabajadores y una vez iniciada las operaciones 2.300 empleados.
«Lo que queremos es trabajar y vemos la posibilidad de proporcionar nuestra mano de obra o prestar servicios que requerirán los empleados», dijo Omar Quezada, mantense, quien señala que ya piensa en abrir un comedor en El Aromo, pues considerada que es una oportunidad para que surjan nuevos negocios.
El proyecto de Refinería del Pacífico fue constituido en 2008. El 51 por ciento de las acciones la tiene Petroecuador y el 49 por ciento restante la petrolera venezolana Pdvsa. En cuanto al costo de la obra: el 30 por ciento lo colocan los acciones y el 70 por ciento restante es por financiamiento externo.
La necesidad de construir el complejo hidrocarburífero se debe a que la producción de las refinerías del país no abastece la demanda interna de combustibles. El Gobierno tiene que importar derivados para satisfacer el consumo nacional y cubrir el déficit que se estima que en 2018 será de 120 .000 Bbl por día.
La nueva planta permitirá procesar 300 mil barriles de petróleo por día, con lo cual se satisfacerá la demanda interna y los excedentes colocarlos en los mercados internacionales. Los derivados podrán colocarse en mercados como el de Perú, Chile, países de Centro América e, incluso, estados de la costa este de América.
La tecnología a emplearse será de conversión profunda que permitirán producir gasolinas, jet fuel, diésel, coque, azufre y bases petróquimicas.
El proyecto incluye la construcción de poliductos, oleoductos, un sistema portuario de monoboyas, instalaciones marítimas. Se espera instalar un poliducto de 160 kilómetros, el sistema portuario aún está por definirse su ubicación; además de un gasoducto, entre otros.
La instalación de la refinería, una vez adecuado el espacio (primera etapa) tarda un tiempo estimado de entre 4 a 6 años.
La refinería producirá:
Gas Licuado de Petróleo
Gasolinas
Jet fuel
Diésel
Benceno
Xileno
Polipropileno
Azufre
Coque