Denuncias anónimas de la ciudadanía permitieron al Ministerio del Ambiente, el decomiso de una tortuga carey (Eretmochelys imbricata) y dos monos payaso (Saimiri sciureus).
El primer operativo de control ambiental se dio en una tienda de mascotas, ubicada en las calles Cuenca y Eloy Alfaro, centro de la urbe porteña. En el sitio, los inspectores del MAE hallaron el quelonio en exposición para la venta.
El MAE destaca que el decomiso se produjo gracias a una denuncia reservada. La tortuga carey forma parte de las especies protegidas, según la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites), a la que Ecuador está suscrito.
Personal técnico de la Reserva de Producción Faunística Manglares 'El Salado' procederán a la reinserción del reptil a su hábitat natural en el Golfo de Guayaquil.
La propietaria de la tienda de mascotas, Lidia Naranjo, accedió a la devolución voluntaria de la tortuga marina, pero enfrentará un proceso administrativo por el ilícito.
Posteriormente, un ciudadano de origen asiático entregó voluntariamente la pareja de monos payaso. El extranjero reveló que adquirió los animales en la frontera de Ecuador y Perú. Los primates fueron retirados de una vivienda en las calles H. Alcívar y Justino Cornejo, en ciudadela Kennedy Norte.
Los animales fueron llevados a un refugio provisional, donde permanecerán en cuarentena hasta conocer si es posible insertarlos en su hábitat natural.
