Los abogados de los 30 mil afectados por las actividades petroleras de Chevron-Texaco en la Amazonía demandarán penalmente a la compañía y al ex juez ecuatoriano Alberto Guerra.
Así lo confirmó Pablo Fajardo, representante de los perjudicados por la contaminación cometida por la multinacional entre 1964 y 1992, en Sucumbíos. “Haremos una demanda penal aquí en Ecuador para que venga y responda por un delito grave, pero también en Estados Unidos porque hay un delincuente que se llama Alberto Guerra (ex juez de la Corte Superior de Sucumbíos que entre mayo y diciembre de 2003 tuvo a su cargo la querella contra la petrolera) y otro delincuente que lo protege y que es Chevron”, resaltó Fajardo.
El jurista se refirió al supuesto soborno que le hizo Chevron a Guerra, a quien habría pagado $ 316 mil para que ponga en duda la transparencia de la sentencia que condenó a la compañía estadounidense a pagar $ 19 mil millones como indemnización y para remediación ambiental.
Según los demandantes, los $316.000 que recibió Guerra supuestamente fueron distribuidos así: $38 mil de contado para compensarlo por el valor de la evidencia física que presentó y que incluye los documentos y la prueba forense guardada en sus computadoras, celulares, discos duros y registros bancarios; un sueldo de $10 mil mensuales durante dos años, (Chevron lo llama gastos por costo de vida); y $2.000 mensuales para vivienda, movilización, seguros de salud y honorarios de abogados.
El portavoz de Chevron, Kent Robertson, durante una entrevista admitió la semana pasada que la compañía entregó dinero a Guerra y le prometió pagos adicionales.
Además, indicó que sacaron del Ecuador a Guerra y a cuatro miembros de su familia y asumieron el pago de su estadía en Estados Unidos “para garantizar su seguridad”, justificó el vocero.
Ahora Fajardo acusa a Guerra de estar vinculado a Chevron y de actos de corrupción cuando fue funcionario judicial. Añade que por ello fue sancionado varias veces y destituido de la Función Judicial en 2008.
Y añadió que siempre fue favorable a las tesis de la multinacional. En 2008 lo destituyeron por prevaricato (adelanto de criterio respecto a un fallo) al afirmar que si llegaba a la Presidencia de la Corte Provincial de Justicia de Sucumbíos, la primera acción que iba a tomar era declarar la nulidad del trámite judicial entablado por los afectados, que era una de las peticiones de la compañía petrolera.
Fajardo recordó que en una ocasión Guerra le dijo: “doctor Fajardo, dígame cuánto hay de plata para mí, yo quiero unos $500 mil y ojalá vivir en Estados Unidos. Si me dan ese dinero digo lo que quieren que diga”.
Guerra estaría en Miami con su familia, pues salió de Ecuador el 12 de enero pasado. “Está recibiendo un sueldo de Chevron. Ese es el chantaje, el soborno real que hace Chevron a Guerra”, criticó Fajardo.