Los 36 clubes de la primera y la segunda Bundesliga de Alemania aprobaron hoy una nueva estrategia de seguridad, en medio de discusiones y ante protestas de algunas organizaciones de aficionados.
La nueva estrategia incluye más controles de seguridad en la entrada a los estadios y un aumento de los controles a través de vídeo para poder identificar a posteriori a aficionados que incurran en actos de violencias.
El St. Pauli, actualmente en la segunda Bundesliga, había anunciado de antemano que se opondría a la estrategia de seguridad.
La estrategia había sido diseñada en una cumbre de los máximos responsables de la Federación Alemana de Fútbol y de la Bundesliga con el ministro de Interior, Hans Peter-Friedrich, representantes de los estados federados.
La discusión sobre la seguridad en los estadios alemanes se intensificó a partir de la temporada pasada cuando diversos episodios protagonizados por aficionados del Dynamo Dresde llevaron a la exclusión de ese club de la Copa de Alemania en esta temporada.
Ya en esta temporada, una serie de acontecimientos violentos en el marco del derbi de la cuenca del Ruhr entre el Borussia Dortmund y el Schalke volvieron a darle actualidad al tema.
Algunos grupos vienen protestando desde hace semanas con los planes y entre las acciones que han realizado ha sido la de mantenerse en silencio durante los primeros doce minutos de cada partido.