El gobernante uruguayo, José Mujica, recibió este viernes la presidencia rotativa del Mercosur de manos de la jefa de Estado de Brasil, Dilma Rousseff, y aseguró que durante los seis meses en que la ejercerá «se hará lo que se pueda».
Con la transmisión de la presidencia semestral concluyó, además, la XLIV Cumbre del Mercosur, de la cual la organización brasileña sólo transmitió en el centro de prensa las imágenes y el audio de la apertura y de los minutos finales de la clausura.
En sus palabras, Mujica valoró el interés de Bolivia por sumarse al Mercosur como miembro pleno, pues consideró que «está haciendo falta la presencia de los pueblos indígenas».
Además de Rousseff y Mujica, en la cumbre participó la presidenta argentina, Cristina Fernández, mientras que la representación de Venezuela fue asumida por el ministro de Petróleo y presidente de PDVSA, Rafael Ramírez, ante la ausencia del jefe de Estado, Hugo Chávez.
También estuvieron presentes los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Ecuador, Rafael Correa, quienes están interesados en imitar a Venezuela y discutir la posible incorporación de sus países al Mercosur en calidad de miembros plenos.
Paraguay, el quinto miembro pleno del Mercosur, no participó en la cumbre porque está suspendido desde finales de junio pasado por la destitución de la Presidencia de ese país de Fernando Lugo.
En un comunicado emitido hoy por su Cancillería en Asunción, Paraguay recordó que le correspondería asumir la presidencia temporal del Mercosur y advirtió de que tanto el ingreso de Venezuela como el de otros nuevos miembros como Bolivia y Ecuador será nulo.
Tras la conclusión de la única plenaria de esta cumbre, los jefes de Estado compartirán un almuerzo ofrecido por Rousseff.
El programa oficial dice que luego se dirigirían hacia un hotel cercano para asistir a la clausura de un Foro Empresarial, pero de acuerdo a fuentes oficiales, no está confirmado que lo harán todos los asistentes.