Beber una o dos copas de vino a la semana durante el embarazo puede tener un impacto en el coeficiente intelectual del bebé, afirma un estudio.
Investigadores de las universidades de Oxford y Bristol, en Reino Unido, analizaron los coeficientes intelectuales de 4.000 niños, así como el consumo de alcohol de las madres.
Hallaron que el consumo «moderado» del alcohol, de una a seis unidades a la semana durante el embarazo, afecta el coeficiente.
Los expertos dijeron que el efecto es pequeño, pero reforzaron la necesidad de evitar el alcohol durante el embarazo.
Estudios anteriores produjeron evidencias inconsistentes y confusas sobre el daño que puede causar el consumo bajo o moderado de alcohol durante el embarazo, en gran parte porque es difícil separar otros factores que pueden influir, como la edad y la educación de la madre.
Pero esta investigación, presentada en la publicación PLOS One, descartó eso al mirar a los cambios en los genes que no están conectados con los efectos sociales o del estilo de vida.