La devolución de los valores cobrados por matrículas, cursos, seminarios, derechos de grado, entre otros rubros para la obtención de títulos académicos en la Universidad Estatal de Guayaquil, no se estaría cumpliendo. Así lo revelaron la mañana de este lunes Víctor Padilla Farías y Geovanny Sánchez Párraga, miembros de la agrupación “Acuerdo Estudiantil por el Cambio”.
“Dentro de la Universidad de Guayaquil están haciendo una cacería de brujas contra los estudiantes que hemos denunciado los cobros ilegales”, denunció Padilla.
El estudiante del séptimo semestre de la carrera de Ingeniería en Sistemas Computacionales, recordó que la devolución de los rubros fue anunciada el 16 de octubre último por el rector del Alma Mater Porteña, Carlos Cedeño Navarrete, seis días después que una investigación de la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), revelara que la gratuidad de la educación superior, consagrada en la Constitución y leyes de educación superior, estaba siendo desconocida.
“Personalmente he recibido amenazas diciéndome que no me voy a poder graduar si sigo con el tema de las denuncias. Incluso, están consiguiendo las órdenes de pago usadas por la Senescyt para realizar su informe, para saber quiénes son y caerles con todas las fuerzas”, ratificó Padilla.
El alumno cuestionó el pronunciamiento del rector Cedeño, quien en todo momento ha deslindado la participación de las autoridades universitarias en el tema de los cobros ilegales a los aproximadamente 100.000 estudiantes que acoge la Universidad de Guayaquil.
“Con mucho respeto el digo al señor rector que me parece sin sentido que diga él que las autoridades no tienen competencia en los hechos o cobros, significa entonces que nosotros mismos nos hemos cobrado ilegalmente”, comento.
Las denuncias del representante de la agrupación “Acuerdo Estudiantil por el Cambio” van más allá de la no devolución de los valores por los cobros ilegales sino que estos rubros siguen siendo exigidos por las autoridades de las diferentes facultades a los estudiantes para que estos puedan continuar con sus carreras.
El dirigente estudiantil Padilla sostiene que para evitar que las autoridades universitarias se vean involucradas en el cobro de los rubros, los pagos por los cursos y seminarios son realizados a empresas creadas por empleados, profesores o por familiares de las mismas autoridades del centro de estudios.
“En Ingeniería en Sistemas cobran por tesis 500 dólares y en (la facultad de) Administración 1.200 dólares. El cinismo de las autoridades es algo increíble. Dicen que no están cobrando y que a los estudiantes se los respeta”, exclamó Sánchez Párraga.
Ambos estudiantes de la agrupación universitaria coincidieron en culpar de las amenazas recibidas a las autoridades universitarias, contra las cuales pidieron sanciones. “Pedimos a la Senescyt o al Consejo de Educación Superior, la intervención de la Universidad de Guayaquil por las múltiples irregularidades que existen en su administración”, dijo el alumno del sexto semestre de Ingeniería Comercial.