Un mail alertó a los 129 trabajadores de Diario El País que habían sido despedidos en cumplimiento del llamado Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que contiene la propuesta de ajuste de la empresa presentada ante la Dirección de Empleo de la Comunidad de Madrid.
Diario El País, propiedad del grupo Prisa, anunció el pasado 9 de octubre un ERE, que prevé la supresión de 149 puestos de trabajo, de un total de 466.
Las voces de protesta se alzaron desde la redacción del diario. En su cuenta de Twitter, Ramón Lobo, periodista de este medio de comunicación, escribió: “La empresa divulga la lista de los 129 despedidos. Estoy en ella. Mi perfil digital y mi trayectoria son insuficientes”, finalizó el mensaje con el hashtag #NoalEredelPais.
Los nombres de los despedidos comenzaron a confirmarse en Twitter, cuando los propios periodistas de El País hicieron público que fueron incluidos en la lista. Entre ellos se encuentran Ramón Lobo, Javier Valenzuela, Miguel A. Villena, José Yoldi, Manuel Cuéllar, Antonio Fraguas, Santiago Carcar, Julio M. Lázaro y Lourdes Lucio.
Algunos llevaban trabajando cerca de 30 años en el periódico.
El ajuste afecta principalmente a las delegaciones de Andalucía, donde fueron despedidas 13 personas, Valencia (12) Galicia (8) y País Vasco, “que ha quedado prácticamente desmantelada”, según la información que los propios trabajadores de El País publicaron la tarde del sábado a través de blogs.
El tema se convirtió en trending topic en España, con el hashtag #ElPaisTeDespide. Los comentarios, casi en su totalidad negativos hacia El País, son alojados en dicho tema.
El rechazo por la medida se sintió en las redes sociales, donde al menos 1.000 seguidores, en una hora, le quitaron su follow a la cuenta del diario en Twitter @el_pais.
La comunidad de periodistas de España se ha solidarizado con los despedidos e informó que presentará un recurso para detener el cese laboral.
El recorte en El País se da como consecuencia de la crisis del grupo multimedia Prisa, que tiene una deuda superior a los 4 mil millones de euros.
La última oferta de Grupo Prisa era abonar a los trabajadores una indemnización de 35 días por año trabajado con el tope de cuarenta y ocho mensualidades y 175,000 euros. Sin embargo, la dirección pretendía abonar estas cantidades en tres entregas, en el plazo de un año.
Los trabajadores no aceptaron la propuesta, por 207 votos en contra y 137 a favor, y por ello la empresa ha decidido aplicar las condiciones más duras de la reforma laboral: 20 días por año trabajado y el tope de una anualidad. El comité ya manifestó en la rueda de prensa de la semana pasada que irían a los tribunales si no se llegaba a un acuerdo.