El Barça de Leo Messi llega esta vez al enfrentamiento con una cómoda ventaja de ocho puntos sobre su histórico adversario en la clasificación. Es líder con un pleno de seis victorias, mientras que su gran rival es sólo sexto.
Por ello, las urgencias y la presión están más en el lado de los hombres de Jose Mourinho, que parecen haber levantado el vuelo tras un mal inicio de temporada.
Desde la derrota de hace dos semanas y media contra el Sevilla (1-0), el equipo blanco ha encadenado cuatro triunfos consecutivos, dos en la Liga de Campeones y dos en la Liga española, que han permitido al equipo salir de la zona medio-baja y mirar con más optimismo hacia arriba.
Al Clásico llega además en especial buena forma su estrella portuguesa, Cristiano Ronaldo, que ha firmado dos 'tripletes' seguidos, el domingo para golear 5-1 al Deportivo de La Coruña y el miércoles en ámsterdam ante el Ajax, por un contundente 4 a 1.
Para el Barça, los problemas físicos de algunos jugadores son el principal problema, especialmente en defensa, donde Carles Puyol fue la última, al sufrir una luxación de codo el martes en Lisboa ante el Benfica, en el día en que regresaba a la competición tras tres semanas de ausencia por una lesión en una de sus rodillas.
El partido, como de costumbre, ha generado una gran expectación y medio país seguirá con atención qué ocurre en el Camp Nou, en el tercer duelo entre ambos en esta temporada, después de los dos de la Supercopa de España.
En ella, en el mes de agosto, el Real Madrid se llevó el título tras ganar 2-1 en la vuelta, después de haber caído 3-2 en el primer partido en Cataluña. El mayor número de goles fuera de casa le permitió llevarse el trofeo.
Fuera del Clásico, el duelo más atractivo será el que mida al Atlético de Madrid, segundo a dos puntos del Barça, con el Málaga, tercero a cuatro unidades del líder y que llega tras golear 3-0 al Anderlecht belga en la Liga de Campeones.
AFP