Pablo Zavala, gerente general de Fabrec EP, señala que la planificación se basa en atender todas necesidades que pudieran surgir de la convivencia de los policías en las nuevas instalaciones.
Para el ministro del Interior, José Serrano, se trata de dignificar las condiciones sociales en las que los policías desarrollan su trabajo. “Nunca más tendremos a nuestros policías durmiendo en colchones prestados. Dignificar su trabajo es favorecer la dignidad colectiva, de nuestros ciudadanos”, explicó durante su reciente visita a Machala.
Zavala explicó que el nuevo modelo de gestión insiste en que las tareas cotidianas de los policías de los UPC no se distraigan con obligaciones domésticas relacionadas con el cuidado de las nuevas instalaciones.
Antes de la aplicación del modelo desconcentrado, los policías eran responsables de dar mantenimiento a los retenes que habitaban. Muchas veces se ocupaban de asuntos administrativos como pago de servicios, entre otras tareas ajenas a sus responsabilidades. Con el modelo desconcentrado, estas tareas pasan a personal civil designado exclusivamente para esas ocupaciones.
“Lo que buscamos con eso es que el policía se enfoque únicamente en dar seguridad, que no se encargue de temas administrativos que muchas veces ocupan gran parte de su tiempo. Que tengan todas las herramientas, que tengan la tranquilidad de llegar a un lugar digno y puedan descansar”, insistió.
El presupuesto disponible desde Fabrec para inversiones en las UPC alcanza los $160 millones. La mitad de esa cifra se destina a infraestructura, el restante financia la adquisición de mobiliario, vehículos y equipos de comunicación con que cuenta cada unidad.
Para el año 2013, el Gobierno Nacional espera contar con 1800 UPC funcionando en todo el país.
