Un hombre armado con un hacha asesinó a tres niños y causó heridas a otros trece este viernes, en una guardería en la región autónoma de Guangxi, al sur de China.
Tras recibir la llamada de emergencia, la Policía acudió al lugar y las ambulancias trasladaron a los dieciséis menores heridos al hospital más cercano. Tres de ellos murieron tras ser atendidos.
El sospechoso fue detenido y se encuentra bajo disposición policial. Las causas del crimen están aún siendo investigadas.
En 2010, los sagrientos ataques perpetrados con arma blanca contra escuelas por individuos que alegaban que habían sido expoliados o estaban desempleados causaron 17 muertos y dejaron estupefacto al país por su salvajismo.
Las estadísticas oficiales muestran un aumento global de la criminalidad en China estos últimos 30 años pero las autoridades subrayan que el número de homicidios es inferior al que se registra en los países occidentales.