Un grupo de artificieros militares desactivó un vehículo que presuntos guerrilleros de las FARC cargaron con 400 kilos de explosivos en un paraje rural de Miranda, localidad en el conflictivo departamento colombiano del Cauca, informaron hoy fuentes castrenses regionales.
El automóvil-bomba, que iba a ser utilizado en un atentado en la misma zona, fue descubierto por unidades de la llamada Fuerza de Tarea Apolo, creada hace poco con la misión de desalojar a los rebeldes que actúan en ese departamento del suroeste del país.
En un comunicado difundido en Bogotá, esta unidad castrense precisó que la bomba había sido instalada en un auto que los rebeldes pintaron de negro «para engañar a la fuerza pública que mantiene controles en las vías» de la parte norte del Cauca.
«En el interior del vehículo fueron encontrados 400 kilos de explosivos que habían sido instalados para ser activados por telemando», agregó la fuente, que indicó que el fin de los rebeldes era «causar terrorismo a la población civil y graves daños a la infraestructura vial».
La carga fue desactivada por artificieros militares que también hallaron y neutralizaron en los alrededores tres cilindros de gas doméstico cargados con explosivos y metralla.
El plan terrorista fue atribuido por la fuente a la Columna Móvil «Gabriel Galvis» de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), reducto al mando de un insurgente conocido con el alias de «Marcos».