El tango argentino conmemora hoy el 75 aniversario del mito de Carlos Gardel, fallecido en un accidente aéreo en la ciudad colombiana de Medellín cuando el «Zorzal criollo» realizaba una extensa gira latinoamericana.
Los seguidores de «El mago», que con su voz llevó el tango desde los arrabales de Buenos Aires a París, Nueva York y el resto del mundo, volverán a desfilar este jueves con sus ofrendas en la tumba del artista en el cementerio porteño de Chacarita, donde descansan desde 1936.
El Museo de Gardel, situado en la casa del barrio de Abasto donde el artista vivió con su madre, Berta Gardés, será además escenario de un recital de tangos como corolario de una exposición sobre el fallecimiento del artista, ocurrida el 24 de junio de 1935.
Será una conmemoración «austera» en vista de la pasión de los argentinos por el fútbol, comentó el presidente del Centro de Estudios Gardelianos, Enrique Espina Rawson, al indicar que el grueso de los actos de homenaje al artista han sido aplazados hasta después del Mundial de Sudáfrica.
«Carlitos, que fue hincha fanático del Racing Club, habría estado de acuerdo y seguramente estaría tan entusiasmado como el resto de los argentinos por el buen desempeño de la selección en el Mundial», aseguró.