El Comité de Operaciones de Emergencia COE se reunió el pasado lunes, para evaluar el trabajo cumplido ante la emergencia volcánica que se reinició el 28 de mayo pasado. Según fuentes de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, la tregua del volcán Tungurahua habría propiciado el reordenamiento de la gestión integral del riesgo en la provincia.
Con esta oportunidad, el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional presentó su último informe técnico, donde de puntualizó que el volcán Tungurahua registra una leve actividad, con emisiones de poca, moderada carga de ceniza y que “se estaría cumpliendo uno de los escenarios pronosticados, una sostenida actividad”.
De su parte, Marcos Montesdeoca, coordinador de la Unidad Provincial de Gestión de Riesgos de Tungurahua, destacó el trabajo cumplido en la emergencia del volcán Tungurahua por las diversas entidades gubernamentales, así como la labor desarrollada por la Policía Nacional y el Ejército.
La dotación de baterías sanitarias, desinfección y construcción de un pozo séptico en el albergue de Cotaló (Pelileo), por parte del Municipio de Pelileo, el Ministerio de Inclusión Económico y Social y la Cruz Roja, fue un aspecto importante que se evidenció en los reportes.
El alcalde de Pelileo, Manuel Caizabanda sugirió que la Mesa Económica es la de mayor urgencia operar, puesto que la constante caída de ceniza en los poblados cercanos al volcán merma la producción e ingresos económicos de los habitantes, para ello, el Ministerio de la Producción y el INEC definen los parámetros de un censo urgente que se aplicará en las zonas de afectación volcánica.
A partir del pasado lunes 5 de julio, el COE y la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos en Tungurahua mantendrán reuniones de trabajo permanentes, a fin de implementar el nuevo Modelo de Gestión Integral del Riesgo.