Ninguno de los siete doctores y una enfermera investigados por las autoridades de California enfrentarán juicios criminales por la muerte del cantante Michael Jackson, dijo el miércoles la oficina del fiscal general del estado.
Los investigadores no encontraron evidencias suficientes para interponer una acusación criminal contra ninguno de los médicos, dijo Christine Gasparac, vocera del fiscal general Jerry Brown.
No obstante, un doctor que recetó drogas al cantante de pop –usando un nombre falso- poco antes de la muerte del artista puede ser penalizado por la Junta Médica de California, dijo Gasparac.
La funcionaria no identificó al doctor que fue remitido a la Junta Médica ni a los otros que fueron absueltos.
El doctor Conrad Murray, que era el médico personal de Jackson cuando murió hace un año, no formó parte de la investigación, dijo Gasparac. Murray fue acusado de homicidio involuntario a principio de este año por la muerte del artista.
Agentes estatales de drogas realizaron allanamientos en oficinas de varios doctores el verano pasado y en al menos una farmacia.
“Después de revisar cientos de páginas de registros y documentos obtenidos de los médicos, la oficina del fiscal general ha remitido a un doctor, que recetó medicamentos a un alias que se sabe fue usado por Jackson, a la junta médica de California para más revisión”, dijo Gasparac.
Los agentes pasaron varias horas dentro de la farmacia Mickey Fine justo debajo del consultorio en Beverly Hills del doctor Arnold Klein, el dermatólogo de Jackson.
Los investigadores también visitaron la oficina de Klein, en donde Jackson fue visto varias veces en las semanas previas a su muerte del 25 de junio de 2009.
Klein le dijo a CNN el año pasado que nunca recetó medicamentos peligrosos al cantante.
La búsqueda policial en la mansión alquilada por Jackson reveló una larga lista de drogas recetadas en su habitación después de su muerte, según dicen los documentos de la corte y el informe de la autopsia.
El juez de instrucción del condado de Los ángeles determinó que la muerte de Jackson fue producto de una sobredosis de propofol, una poderosa anestesia usada para dormir a pacientes de cirugía.
Un informe de un consultor incluido en la autopsia dijo que el nivel de lorazepam, un poderoso agente contra la ansiedad hallado en el cuerpo de Jackson, “habría acentuado la depresión respiratoria y cardiovascular del propofol”.
