Helen Bicknell y Nicola Rothon, la pareja de inglesas residentes en Ecuador, trasladarán su lucha a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) si en este país no prospera la batalla legal que afrontan para inscribir a su hija ecuatoriana con el apellido de ambas.
Karen Barba, representante de la fundación Causana que apoya a las madres inglesas, aseguró que hoy apelarán la decisión de un juez ecuatoriano que el lunes resolvió contra ellas en el proceso que se ha abierto para inscribir a la niña.
Barba indicó que el caso podría llegar hasta la Corte Constitucional si la Corte Provincial resuelve contrario a las madres.
En el caso de que en la segunda instancia no se acepte la apelación, Barba indicó que irán a «instancias internacionales», aunque apuntó que «todavía hay la posibilidad de que en Ecuador se puedan resolver estas causas».
«Este es un caso que va a tener que resolverse de cualquier forma: por la vía nacional o internacional», puntualizó.
Helen Bicknell y Nicola Rothon, una pareja que lleva catorce años juntas, decidieron tener su primer bebé, Satya, que nació hace cuatro meses tras un tratamiento de inseminación artificial.
Las madres decidieron inscribir a la niña con el apellido de las dos, pero el Registro Civil no se los permitió.
El problema recae en que si bien la Constitución ecuatoriana de 2008 reconoce a las «familias en sus diversos tipos» y da la libertad a los progenitores de inscribir a sus descendientes con el nombre que deseen, la normativa del Registro Civil, de 1978, tan sólo permite que los niños lleven los apellidos de un hombre y de una mujer o los de la madre soltera, pero no contempla la doble maternidad.
El juez Vicente Altamirano, del Juzgado Cuarto de Garantías Penales de la provincia de Pichincha, rechazó el martes la acción de protección presentada por Bicknell y Rothon para registrar a su hija con el apellido de ambas, al considerar que violaron el procedimiento.