La empresa Agip-Eni, distribuidora de gas licuado de petróleo (GLP) podría ser clausurada si persiste con el aumento en el precio del combustible, en Pichincha. Así lo declaró el ministro de Recursos Naturales No Renovables, Wilson Pástor.
La empresa Agip-Eni decidió, unilateralmente, subir el precio de distribución del GLP en 8 centavos. “Esto está penalizado por la ley. Se harán los expedientes administrativos correspondientes y, si persiste esta situación, no me temblará la mano para cerrar las distribuidoras y las comercializadoras que la incumplen”, señaló Pástor.
Francisco Polo, director de la Agencia de Regulación y Control Hidrocarburífero (ARCH), dijo que tras la reunión mantenida con directivos de la empresa Agip-Eni, estos se negaron a revisar el precio del GLP. “Estamos abriendo los expedientes administrativos. El trámite no se demora y máximo hasta el lunes ya tendremos un resultado sobre eso”, agregó Polo.
El ministro Pástor agregó además que su cartera de Estado realizó un estudio con una firma internacional para revisar las tarifas del gas, la gasolina y el diesel. La medida tomada por Agip-Eni podría ser vista como una retaliación debido a una auditoría realizada por el ministerio.
“Estudiamos el caso del GLP en toda la cadena: envasado, transporte, distribución, comercialización. Las empresas saben perfectamente que se beneficiaron del fondo del cilindro, en alrededor de un 11%. Hay una auditoria por varias decenas de millones de dólares en contra de las distribuidoras”, manifestó el secretario de Estado.
Finalmente, Pástor dijo que Petroecuador está en posibilidades de asumir las operaciones de la empresa. “Petroecuador tiene la capacidad casi total de importación y producción de gas, casi la totalidad del envasado y, si se persiste en medidas de este tipo, no tengo la menor duda en que podremos distribuir y comercializar el gas”, puntualizó el ministro.