La mejor forma de controlar la natalidad es “una adecuada educación sexual”, según dijo hoy el presidente la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE), Antonio Arregui, ante el anuncio del Gobierno de impulsar una intensa campaña de planificación familiar en el país. En rueda de prensa, el representante de la iglesia rechazó los métodos “mecánicos” y “farmacológicos” para controlar la natalidad ya que, en su opinión, solo la educación sexual “lleva al respeto de una educación sexual como expresión del auténtico amor humano”. Según Arregui, los jóvenes no necesitan “una promesa falsa” de sexo seguro e información sobre métodos anticonceptivos”, sino una formación “integral” sobre su sexualidad. En ese aspecto, la CEE concuerda con los planes propuestos desde el Gobierno. De acuerdo con el Ministerio de Salud, el primer componente de la campaña será el de una educación que “impulse el desarrollo humano”, explicó la coordinadora de Adolescencia de esta cartera, Susana Guijarro. Arregui coincide con ello al señalar que la educación debe abarcar el aspecto corporal, emocional, espiritual y afectivo, donde se “enfoque la sexualidad de manera constructiva (…) y no la rebaja a simple técnica de ‘hacer el amor’, sin la ulterior responsabilidad”.
Pero los especialistas del Ministerio de Salud creen que los indicadores, como que la edad promedio de iniciación sexual en Ecuador es de 14 años, son claros y se debe actuar sobre ellos. Belén Nieto, líder de la Salud de la Mujer del Ministerio de Salud Pública, afirmó que ningún método de planificación familiar fomenta el aborto. La funcionaria aclaró que la Estrategia Nacional Intersectorial de Planificación Familiar no consiste únicamente en la entrega de métodos anticonceptivos, sino que implican tres componentes: adecuado control preconcepcional, la atención a las parejas que no quieren tener hijos hasta cumplir otras metas de vida y por último la ayuda a parejas infértiles. En otros aspectos, monseñor Arregui denunció que la mayoría de métodos artificiales de control de la natalidad “se difunden con ofrecimientos engañosos, respondiendo a intereses económicos (…)” y “generalmente son abortivos”. Respecto a la esterilización, la CEE considera que es la mutilación de un órgano noble, “inaceptable como medio de control natal según la ley de Dios”. Asimismo, sostiene que en muchos países la difusión de la anticoncepción ha fomentado la promiscuidad, la multiplicación de enfermedades venéreas y el número de abortos.
Por su parte, en días pasados, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, anunció que en los próximos meses se promoverá una campaña agresiva de planificación familiar. En su pronunciamiento, el Mandatario dijo: “Yo jamás dudaré de la buena intención de los sectores de la iglesia (que no permite uso de métodos anticonceptivos), pero con estos preceptos se hizo mucho daño en áfrica donde no se permitió el uso de preservativos pese al brote de sida”. Asimismo, añadió que estará dispuesto a tomar el riesgo “de enfrentarse a las críticas de ciertos sectores”. Las cifras revelan que una de cada cinco adolescentes estuvo embarazada o es madre y uno de cada cinco partos corresponde a adolescentes menores de 19 años.