Una vez que terminaron los estudios de prefactibilidad, hasta marzo de 2011 se terminarán los diseños definitivos para iniciar con la construcción de estas centrales que aportarán energía al sistema nacional interconectado.
Los consejos provinciales del Azuay y El Oro conformaron en 2008 la empresa de Generación Eléctrica Enerjubones, para llevar adelante los estudios, la construcción y la operación de estos dos proyectos.
Según el gerente de Enerjubones, Diego Rodas Zumba, los estudios finalizaron, aunque se encuentran «en proceso de revisión». Los proyectos están ubicado en el sur de la provincia del Azuay. El Minas-San Francisco se ubica en el sur occidente de la provincia, a 92 kilómetros de Cuenca, en la confluencia del río Jubones con el San Francisco, parte baja del cantón Pucará; de allí, se construirá un túnel de conducción de 13 km de longitud, una casa de máquinas y un desfogue hasta el río Jubones. Mientras el proyecto La Unión aprovechará las mismas aguas en el sector de Pitaguiña.
La Comisión Federal de Electricidad de México realiza la fiscalización de los estudios, la que recibió el apoyo de técnicos ecuatorianos, y se espera contar ahora con los diseños definitivos. Los estudios fueron financiados por el desaparecido fondo Feisec, organismo que aportó $10,5 millones, mientras los gobiernos provinciales del Azuay y El Oro aportaron con $1 millón, y hasta completar los $17 millones fue con presupuesto del Estado.
Rodas manifestó que estos proyectos servirán para cubrir los requerimientos de más de 2,3 millones de personas que necesitan energía, «lo que representa el centro y el sur del Ecuador».
El Minas- San Francisco costará $450 millones, y La Unión $220 millones, para un costo total de los dos proyectos de $670 millones, que serán financiados por el Gobierno nacional y por los dueños de los proyectos, en este caso, los consejos provinciales del Azuay y de El Oro, que están buscando el financiamiento. «Por lo general, se financian en un porcentaje con la venta de electricidad en el futuro», dijo Rodas.
De su lado, David Acurio, prefecto (e) del Azuay, dijo que este es uno de los pocos proyectos que se van a desarrollar en la margen occidental del Ecuador. «La mayor parte de proyectos está en la margen oriental». Añadió que el proyecto nació por la iniciativa de los dos consejos provinciales. «Por lo tanto, son los propietarios», insistió. Acurio indicó también que los proyectos van a generar mano de obra para quienes están en cantones de Santa Isabel y Pucará. «Todos los pequeños productores se van a articular con este proyecto», manifestó.