La segunda feria de Vivienda Biess 2013 inició en Guayaquil con un llamado de atención, para que los empresarios inmobiliarios ayuden a desacelerar el crecimiento de precios del metro cuadrado.
«Me preocupa que en el último cuatrimestre ha habido un incremento sostenido. Invito a los empresarios a no dañar a la 'gallinita' de los huevos de oro», manifestó el presidente del directorio del Biess, Ramiro González, durante la inauguración, la noche del martes. «Sigamos trabajando bien, no incrementemos los precios de una manera que luego se forme una burbuja inmobiliaria», agregó en su discurso de apertura.
Luego, en un recorrido por los pabellones de exhibición, citó ejemplos que precisaban alzas de hasta un 25% por metro cuadrado. La comparación la hizo entre agosto del 2012, cuando se realizó la primera feria del BIESS en Guayaquil, y el presente abril, en la segunda edición del encuentro. Para el caso de una vivienda con acabados de lujo, destinado al nivel socioeconómico alto, la oferta del m2 promediaba los USD 1 520 hace ocho meses. Ahora, ese valor pasó a bordear USD 1 800.
En el caso de la construcción de una vivienda popular (adosadas) de más de 46 metros de construcción, dijo, el precio del m2 pasó de USD 400 a bordear los USD 500. Ángel Cedeño, gerente de Ventas del proyecto inmobiliario Villa Club, explicó que calcular el costo de un metro cuadrado como parámetro general resulta irreal. «No solo se incluye estrictamente a la construcción de la casa, sino a los acabados y el entorno. Nuestras urbanizaciones ofrecen seguridad, porque son cerradas, y confort, por su espacio verde y de recreación», indicó.
Aunque, compartió el criterio del titular del Biess de aumentar el control en el costo de los materiales de construcción, pero esa es una tarea de las autoridades. Para Cedeño, el eje de todo incremento en el sector es el ajuste anual de la tabla salarial. Para este año, el Gobierno fijó el salario básico unificado en USD 318 y, en el caso de este sectorial, hubo incremento de hasta el 11% para los cargos más altos. «Si sube la mano de obra, sube el cemento, el hierro, porcelanato, cable…», expresó.