El alcalde electo de Cuenca, Marcelo Cabrera, no está satisfecho. La reunión que mantuvo con el burgomaestre saliente de la capital azuaya, Paúl Granda, hace cerca de cuatro semanas le dejaron dudas. Por ello, solicitó información al Municipio cuencano y a sus empresas, pero hasta la fecha recibe una contestación. «Lo que hemos recibido son presentaciones, pero usted sabe que la presentación requiere preguntas que no han sido adecuadamente contestadas en algunos ámbitos importantísimos como el proyecto del tranvía y algunos requerimientos hechos a Etapa».
Aseguró desconocer, por ejemplo, el saldo de las obligaciones contraídas por Etapa, el capital, la nómina de trabajadores del Municipio y de sus empresas públicas. Precisó conocer que en compañías como Farmasol (Farmacias Municipales Solidarias), EMOV (Empresa Pública de Movilidad, Tránsito y Transporte), Etapa (Empresa de Telecomunicaciones, Agua Potable, Alcantarillado y saneamiento) y EMAC (Empresa Municipal de Aseo de Cuenca) han ingresado cerca de 250 trabajadores desde el 23 de febrero hasta la fecha.
Cabrera también criticó que Granda haya ordenado la emisión de títulos de crédito por contribución especial de mejoras por cerca de $ 8 millones. Además, aseguró que Etapa adjudicó un contrato para una planta de tratamiento de aguas residuales por un valor cercano a los $ 22,5 millones. «Por qué no esperó que la adjudicación la haga el gobierno entrante», cuestionó.
Foto: La Voz de Tomebamba