Centenares de afectados por las inundaciones han comenzado a regresar a sus poblaciones en una de las zonas más devastadas por las inundaciones en Pakistán, el sur de la provincia oriental del Punyab, informó hoy a Efe una fuente oficial.
«No creo que se pueda hablar de miles, pero cientos de personas están regresando en el sur del Punyab para comprobar el estado de sus cultivos, cómo han quedado sus hogares, pues el nivel del agua ha bajado», explicó un portavoz de la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres, Ahmad Kamal.
La fuente subrayó no obstante que la situación es todavía muy complicada en el sur del país, en las provincias de Sindh y Baluchistán, en las que las aguas están anegando nuevos territorios y se sigue evacuando a parte de la población.
De acuerdo con su versión, la última gran infraestructura de protección en Sindh, la presa de Kotri, soporta un enorme caudal actualmente, algo que seguirá siendo así «durante los próximos dos o tres días».
«El nivel de las aguas está bajando en casi todo el país, pero los problemas no se acaban. La situación es muy grave, especialmente en el ámbito sanitario, con cientos de miles de enfermos», advirtió Kamal.
Además, unas 800.000 personas son accesibles sólo a través del aire, especialmente en los territorios paquistaníes más septentrionales, según las Naciones Unidas.