El secretario nacional de Comunicación, Fernando Alvarado, en una carta abierta a la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), sostiene que si dicho organismo quiere mantener una audiencia con el presidente Rafael Correa “primero debería presentar sus disculpas y respetos al país” y al propio mandatario.
Así comentó Alvarado después de que, según su misiva, el presidente de la SIP, Gonzalo Marroquín, el pasado 10 de junio en una conferencia en Guayaquil calificara al gobierno ecuatoriano de mantener una actitud traidora, intolerante y autoritaria, con el único fin de “seguir disfrutando las mieles del poder”, reza el texto.
Frente a ello, el secretario de Comunicación destaca que “la insolencia y la desbocada manera con la que el principal de esta organización de propietarios de periódicos se ha referido a un gobierno constitucional, no merece audiencia, primero debería presentar sus disculpas y respetos al país y a su primer representante”.
En días pasados, este organismo solicitó una audiencia con Correa y Marroquín anunció que esa entidad enviaría una misión al Ecuador, en julio o agosto próximo, para buscar un diálogo “sin ninguna condición” y pedirle al gobierno que cese “la persecución y la legislación en contra de la libertad de prensa”.
Ante la posición del organismo, Alvarado cuestiona: “¿Cómo la SIP, que en reiteradas ocasiones ha señalado la supuesta existencia de amenazas a las libertades en Ecuador, intenta por todos los frentes un diálogo con quien llama ‘dictador’ y acaparador ‘de las mieles del poder absoluto’?
En la carta abierta, el secretario de Estado sostiene que el Ecuador es un país que vive a plenitud la democracia y que su Constitución y leyes garantizan el goce de todos los derechos humanos. “La hospitalidad es la característica sobresaliente de nuestra gente. Por ello, y en consecuencia con tal generosidad, no podemos admitir la mentira si alguien quiere entrar a nuestra casa”.
Manifestó que si la SIP busca un encuentro con Correa, este “no puede ser incondicional, esto ya les fue advertido, pues son ineludibles los requisitos de respeto y honestidad con el pueblo ecuatoriano”.
La visita de los representantes de la SIP estaba prevista para la próxima semana. No se ha confirmado si llegaría su presidente, el guatemalteco Gonzalo Marroquín, conocido en su país como “el Berlusconi guatemalteco”.
El hombre ha sido cuestionado duramente en su país varias ocasiones, desde hace algunos años. El periodista Conrado Monroy lo acusó de un comportamiento poco ético frente a la publicación de noticias cuando Marroquín era director del diario Prensa Libre.
Asimismo, debió entregar con orden judical un espacio televisivo cuando terminó el contrato, pues se negó a hacerlo. Marroquín pertenece a una familia de periodistas de gran influencia en Guatemala.
