Un total de 107 fotografías, colocadas sobre soportes de fibra de madera, cuyas imágenes, a través de un proceso químico, fueron distorsionadas se integraron en un solo cuerpo para denominarse Hypómnema.
Esta pieza, realizada por el artista manabita, residente en Guayaquil, Jimmy Lara, resultó la seleccionada como ganadora del certamen anual de pintura Salón de Julio 2012. Desde mañana el público podrá apreciarla en el Museo Municipal de Guayaquil. Además se expondrán las otras obras seleccionadas para esta muestra que se desarrolla también para festejar la Fundación de la ciudad.
Durante el anuncio de los ganadores, ocurrido el viernes pasado, hubo algunas interpretaciones lanzadas en torno a la factura de la obra de Lara e, incluso, a su justificación teórica. Las fotografías corresponden a hechos ocurridos en la realidad: son los desalojos que han ocurrido en asentamientos ilegales que se han dado en los últimos años en la ciudad puerto. Un tema que alude a la marginalidad y a la presión del poder por detener estas ocupaciones. Gran parte de estos hechos conjugan también violencia.
El artista, más allá de explicar el carácter político de la obra, dice que en su propuesta “muestra una situación real, necesaria de documentarla”. Lara, pese a no experimentar de cerca el desalojo, vive Las Malvinas, un espacio que, simbólicamente, está al margen de lo que la ciudad quiere representar.
La obra como concepto pretende abordar, intuyendo a través del uso que le dio Platón al Hypomnemata, que era un cuaderno de apuntes para uso personal o administrativo.
Lara, de 33 años, estudiante del Instituto Superior de Artes del Ecuador (ITAE), con esta pieza se llevó los 10.000 dólares que se repartía para el primer lugar del Salón de Julio. Anthony Arrobo, con la obra ‘2 a 0, Doble a Cero’, se llevó 6.000 dólares y el segundo lugar; y Danny Narváez, con ‘Hábitat biodegradable’, ganó 4.000 dólares y ocupó el tercer lugar. Las tres menciones de honor fueron para los guayaquileños Juan Caguana, Jorge Velasco y Harold Maridueña.
El jurado estuvo integrado por Hernán Pacurucu (Ecuador), Elizabeth Grady (Estados Unidos) y Fernando Farina (Argentina). Ellos evaluaron las 21 obras que fueron preseleccionadas. Larissa Marangoni fue la curadora del concurso.