Las autoridades indonesias elevaron este viernes a 11 el número de víctimas mortales en el accidente del avión militar que se estrelló ayer en un barrio residencial de la periferia de Yakarta, tras la muerte de una mujer indonesia que resultó herida.
Los otros fallecidos son los siete militares que viajaban a bordo del Fokker F-27 y dos niños, de dos y seis años de edad, y la mujer que los cuidaba.
El impacto del aparato provocó varios incendios en viviendas de la zona que sofocaron decenas de camiones de bomberos.
La investigación militar todavía no ha determinado la causa del accidente, aunque la prensa local informa hoy de que el avión siniestrado tuvo problemas para aterrizar en la base de Halim Perdanakusuma, de las Fuerzas Aéreas, cercana al lugar del impacto y a pocos kilómetros de Yakarta.
Los accidentes de aviación son bastante comunes en Indonesia por la precariedad de las infraestructuras aeroportuarias y de mantenimiento de los aeroplanos.
El último siniestro mortal tuvo lugar el pasado 9 de mayo, cuando un avión ruso Superjet 100 (SSJ-100) se estrelló contra un volcán de la isla de Java durante un vuelo de exhibición y murieron las 45 personas que iban a bordo.
