Luego de hora y media de una agitada audiencia de acción de protección interpuesta por el colectivo social Diabluma para frenar la colocación del monumento al expresidente León Febres Cordero en la Planchada del Malecón (barrio Las Peñas), el juez temporal de Garantías Penales, Manuel Prieto, suspendió la diligencia por falta de garantías.
Desde antes de instalarse la audiencia los simpatizantes de agrupaciones políticas de derecha como Madera de Guerrero, Partido Social Cristiano y funcionarios del Municipio de Guayaquil coparon dentro y fuera el auditorio del segundo piso de la Corte de Justicia del Guayas.
Los constantes insultos proferidos contra cualquiera que fuera identificado como “gobiernista”, originaron continuos enfrentamientos dentro del recinto judicial, pero los que dejaron personas heridas se produjeron al inicio y al final de la audiencia.
José Franco, activista de la agrupación Diabluma, resultó con fuertes golpes en su cuerpo y rostro. Narró a la Agencia Andes que “al observar que estaban agrediendo a una compañera intervenimos llamando a la Policía, pero en ese momento nos lanzaron objetos y en unos segundos se abalanzaron para con patadas y puñetes sacarnos del lugar”.
La diligencia se instaló y transcurrió en medio de gritos e interrupciones a los representantes del Ministerio de Patrimonio Cultural, en el momento que el subsecretario Esteban Delgado argumentaba recibió una lluvia de monedas, una de las cuales impacto en su rostro causando una herida en su frente, lo que provocó la suspensión de la misma.
Este hecho provocó el reclamo del asambleísta Andrés Roche quien exigía la reanudación de la audiencia y advertía que “esto es lo que va a ocurrir si pretenden irrespetar a Guayaquil y su historia. Vamos a las calles a defender a la ciudad. Estos son mercenarios que defienden su bolsillo. Que le tengan miedo a Guayaquil enardecido y no a la ministra ‘cachinera’ que los envió”.
En primera fila se encontraba figuras conocidas como la asambleísta Cynthia Viteri, el concejal Vicente Taiano (hijo), y el exdiputado Alfonso Harb, entre otros. Para precautelar la seguridad física de los representantes del gobierno y de Diabluma los agentes policiales formaron un escudo humano que los protegió hasta que desalojaron el recinto de un grupo que a la fuerza trataba de llegar hasta las autoridades.
Un periodista de la Agencia Andes fue impactado con una botella cuando registraba con la cámara de su celular la forma como el asambleísta Andrés Roche azuzaba a la turba.
