El fiscal jefe australiano, Nicola Roxon, ha reiterado que Australia no puede hacer más por el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, refugiado en la embajada de Ecuador en Londres para evitar una orden de extradición a Suecia.
Roxon afirmó que muchos australianos están mal informados sobre el papel de Australia en el proceso legal contra Assange y recordó que el caso despierta «pasiones», informó este lunes el diario «Sydney Morning Herald».
El fundador del portal WikiLeaks es requerido por las autoridades suecas por dos supuestos casos de abuso sexual, pero el activista australiano denuncia que se trata de una estratagema de Washington para llevarlo a Estados Unidos y someterlo a un proceso en venganza por la publicación de miles de documentos secretos.
«Si el señor Assange no está en Australia, el hecho de que sea un ciudadano australiano no nos da derecho a intervenir de la misma manera en el proceso legal», dijo el fiscal, aunque recordó que el periodista y activista australiano cuenta con la asistencia consular.
«No lo veo como un héroe o un terrorista. Lo veo como alguien que hizo algo en lo que creía. La base aquí es que si viajas al extranjero, tienes que someterte a las leyes de otros países», precisó Roxon.
El periodista australiano fue detenido en diciembre de 2010 en la capital británica bajo una orden de arresto dictada por Suecia al ser sospechoso de un caso de violación y asalto sexual a dos mujeres.
Assange mantiene su inocencia al asegurar que las relaciones sexuales fueron consentidas y denuncia un complot internacional para silenciarlo.
El fundador de WikiLeaks arremetió en una entrevista desde la embajada de Ecuador contra el Gobierno de Australia por haberlo abandonado a su suerte, ya que en Estados Unidos afrontaría la pena de muerte.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ha afirmado que su país se tomará «el tiempo que sea necesario» para decidir sobre la petición de asilo de Assange.
Mientras tanto, Scotland Yard custodia la embajada del país andino en Londres a la espera de la salida de Assange que será detenido por violar las condiciones de su arresto domiciliario en el Reino Unido.
WikiLeaks divulgó desde 2010 miles de cables diplomáticos confidenciales que airearon métodos y prácticas cuestionables de muchos gobiernos y que avergonzaron especialmente a Estados Unidos.