El cambio de las tarjetas de crédito y débito magnéticas por documentos inteligentes con chips implica generar modificaciones a 35.000 puntos de venta o POS (Point of Sale), con el fin de tener un mejor control de seguridad y prevenir los delitos financieros.
Las entidades bancarias deberán elaborar y personalizar cerca de 4 millones de nuevas tarjetas con chip para reemplazar las correspondientes de banda magnética.El director ejecutivo de la Asociación de Bancos Privados de Ecuador (ABPE), César Robalino, señaló que los costos y la inversión de este proceso de transición corren por cuenta de cada banco. «Estos puntos de venta tendrán algunas modificaciones porque están diseñados para que solo respondan a tarjetas magnéticas y no a otras», precisó.
Al respecto, Pablo Córdova, gerente de seguridad del Banco Solidario, explicó que los cajeros automáticos que leen tarjetas con bandas magnéticas se les cambiará un dispositivo para que lean el chip inteligente. Agregó que en otros casos habrá que modificar el cajero.
«Son implementaciones e inversiones en seguridad costosas, pero que se hacen conforme a los esquemas y plazos establecidos por la Superintendencia», señaló.
Recalcó que los gastos de este proceso de cambio dependerán de acuerdo al número de clientes con tarjetas que tiene una entidad bancaria y de cajeros u otros dispositivos físicos que estén al servicio de los usuarios.
Córdova indicó que, por ejemplo, el Banco Pichincha tiene dos millones de tarjetahabientes y que es uno de los que más cajeros automáticos tiene en Ecuador . «Le va a costar mucho a este banco implementar este sistema para este número de personas. Asimismo, lo que le costaría a un banco más pequeño que tiene 100.000 tarjetahabientes, es decir, son muchas variables», acotó el gerente de seguridad.
Agregó que de acuerdo a la Resolución 2148 de la Junta Bancaria, que establece este proceso de cambio, el plazo para implementar los nuevos equipos, cajeros automáticos (ATMs), dispositivos conocidos como Puntos de Venta o POS (Point of Sale) y demás debería estar completado a finales de este año.
Mientras que, la aplicación de las nuevas tarjetas con chip hacia la comunidad y el resto de personas que utilizan este sistema, estaría lista en diciembre del año 2014. «Tendríamos todo un año para desarrollar muchos procesos, como educar a la gente, nuevos sistemas de sofware, es decir la implementación total, para que el sistema arranque de la mejor manera posible el 1 de enero de 2015», indicó.
Precisó también que cada banco se encargará de desarrollar campañas de información para dar a conocer a la ciudadanía el uso correcto y adecuado de estas nuevas herramientas. Córdova recordó que en los países de Colombia, Venezuela y México estos procesos duraron hasta tres o cuatro años, pero en Ecuador será máximo dos años.
«Es un proceso complejo, pero totalmente certificado y que se valida. Adicional a eso es un incremento en gastos en temas de seguridad», subrayó. Destacó que a nivel de la banca todos están comprometidos con esta resolución y las instituciones trabajan en este proyecto.
La Resolución 2148 de la Junta Bancaria en uno de sus enunciados, respecto a la protección contra clonación de tarjetas, señala: «contar con dispositivos electrónicos y/o elementos físicos que impidan y detecten de manera efectiva la colocación de falsas lectoras de tarjetas, con el fin de evitar la clonación de tarjetas de débito o de crédito, además de los correspondientes mecanismos de monitoreo en línea de las alarmas que generen los dispositivos electrónicos en caso de suscitarse eventos inusuales».
Tecnología
La tarjeta inteligente tendrá circuitos integrados (chip) que permiten la ejecución de cierta lógica programada, contiene memoria y microprocesadores y es capaz de proveer seguridad, principalmente en cuanto a la confidencialidad de la información de la memoria.Para el presidente del Banco del Pacífico, Efraín Vieira, es imprescindible que por seguridad las instituciones financieras tengan en el menor tiempo posible sus tarjetas de crédito y de débito con chip.
Vieira recalcó que la tecnología aplicada en los chips dependerá de cada institución, porque cada dispositivo tendrá una capacidad de almacenamiento de memoria. «La tecnología que se utilizará es una definición interna de cada entidad. Dependiendo de la capacidad que tenga incluirá los datos que requiera, ya sean los básicos, incluso historiales médicos», manifestó.
Enfatizó que la finalidad es evitar el uso de tarjetas clonadas, transacciones fraudulentas en cajeros o en puntos de venta. La mitad de los clientes del Banco del Pacífico ya cuenta con el chip en sus tarjetas.
De su parte, Enrique Beltrán, presidente del Banco Internacional, señaló que la entidad ya está trabajando en la instalación de chips en las tarjetas, por lo que entre este mes y el próximo estarían listos los nuevos dispositivos. El Banco Internacional tiene 380 cajeros automáticos en el país.
Seguridad en transacciones
Usuarios de tarjetas de crédito y débito tienen gran expectativa sobre este proceso, que esperan que sea más ágil, seguro y eficiente.
Sergio Torres, un tarjetahabiente de Produbanco, indicó que «es importante que se realicen estos cambios en las tarjetas y en los equipos, ya que actualmente la delincuencia se ha incrementado y uno ya no se siente seguro en el momento que se saca dinero de los cajeros. Estas seguridades nos van a ayudar mucho», indicó.
De igual manera, Paula Domínguez, clienta del Banco del Pacífico, cuenta con una tarjeta de crédito desde hace más de 3 años. Ella aseguró que estos nuevos mecanismos «ayudarán a no correr el riesgo de que clonen las tarjetas, además habrá mayor seguridad y confianza en el sistema financiero del país».