Los ritmos boricuas de Calle 13 se coronaron anoche como reyes de la duodécima edición de los Grammy Latinos, una ceremonia en la que obtuvieron nueve de los diez premios a los que aspiraban (competían contra sí mismos en el álbum del año), récord absoluto en la historia de estos galardones.
René «Residente» Pérez y Eduardo «Visitante» Cabra consiguieron los gramófonos dorados al mejor álbum del año y mejor álbum urbano, por «Entren los que quieran»; mejor canción del año y mejor grabación del año, por «Latinoamérica»; mejor canción alternativa y mejor vídeo musical versión corta, por «Calma pueblo».
También se llevaron los de mejor canción urbana, por «Baile de los pobres»; mejor canción tropical, por «Vamo' a portarnos mal», y mejor productor del año, junto al argentino Rafael Arcaute.
Precisamente Arcaute fue el otro vencedor en la sombra, ya que se llevó los seis premios a los que aspiraba, todos ellos por su labor de producción e ingeniería junto a Calle 13.
«Hay que tener huevos para conseguir esto», dijo René en declaraciones a los medios al término de la gala. Vestido con una camiseta que rezaba «educación pública gratuita», a lo que añadió él mismo: «y de calidad», el músico añadió: «Estamos rompiendo muchas barreras con una propuesta que rompe esquemas».
En la categoría del álbum del año estaban también nominados como productores de «Sale el sol», de Shakira.
El cubano Paquito D'Rivera consiguió dos galardones por «Panamericana Suite», al mejor álbum de jazz latino y a la mejor obra/composición clásica contemporánea, el mismo número obtenido por banda de rock mexicana Zoé, con mejor canción de rock, por «Labios rotos», y mejor álbum de música alternativa, por «Música de fondo: MTV Unplugged».
Los artistas españoles Diego El Cigala y Niña Pastori se alzaron con los galardones al mejor álbum de tango («Cigala y Tango») y al mejor álbum de flamenco («La orilla de mi pelo»), respectivamente.
Otro de los premios destacados fue el mejor álbum de folk, que fue a parar a la fallecida Mercedes Sosa, por «Deja la vida volar – En gira».
Fue una ceremonia de tres horas repleta de actuaciones con momentos emotivos, como la primera de Calle 13 con la orquesta sinfónica Simón Bolívar, dirigida por el venezolano Gustavo Dudamel, para cantar «Latinoamérica».
Después siguieron Shakira («Antes de las seis» y «Loca»), Paulina Rubio y Los tigres del norte («Golpes en el corazón»), Maná y Prince Royce («Lluvia al corazón» y «El verdadero amor perdona»), Franco de Vita y Alejandra Guzmán («Tan sólo tú»), Wisin y Yandel con Sean Kingston («Estoy enamorado», «Fire burning» y «Fever») y Marco Antonio Solís («A dónde vamos a parar»).
La segunda mitad del espectáculo fue testigo de las apuestas de Paula Fernandes y Romeo Santos («Meu eu em voce»), Pablo Alborán y Demi Lovato («Solamente tú»), Sie7e y Taboo («Tengo tu love»), Cristian Castro («El triste»), Pepe Aguilar («Canción mexicana»), Pitbull y Marc Anthony («Rain over me»), Romeo Santos y Usher («Promise»), Intocable («Prometí»), Alex, Jorge y Lena («La canción del pescado») y Reyli y Pepe Aguilar («Al fin me armé de valor»).
El público no dudó en ponerse en pie cuando Sofía Vergara le hizo entrega a su compatriota, la colombiana Shakira, del premio Persona del Año, otorgado por la Academia Latina de la Grabación.
«Poca gente sabe que las dos vivíamos cerquita, en Barranquilla», desveló la cantante, quien no dudó en recalcar que ese galardón es «posiblemente» el reconocimiento «más bonito que jamás» ha recibido.
Shakira también se hizo con el premio al mejor álbum vocal pop femenino, por «Sale el sol».
Otros momentos destacados de la ceremonia fueron los premios al boricua Sie7e como nuevo artista, al trío Alex, Jorge y Lena como mejor álbum vocal pop dúo o grupo por su disco homónimo y a los mexicanos Maná al mejor álbum de rock, por «Drama y luz».
Asimismo, el venezolano Franco de Vita se hizo con el mejor álbum vocal pop masculino, por «En primera fila», y los mexicanos Los tigres del norte como mejor álbum de música norteña, por «Los tigres del norte and friends MTV Unplugged».