La Policía mexicana detuvo a Flavio Méndez, alias «El Amarillo», presunto líder y fundador de «Los Zetas», por quien se ofrecía una recompensa de 1,2 millones de dólares.
El presunto delincuente, quien operaba tanto en México como en Guatemala, es acusado por las autoridades mexicanas de varios homicidios, narcotráfico, delincuencia organizada, secuestro, fuga de presos y tráfico de inmigrantes indocumentados.
El sospechoso formaba parte de la lista de los 37 criminales más buscados de México, de los cuales un total de 20 ya han sido capturados por las autoridades del país, y había tres órdenes de captura en su contra, indicó en una conferencia de prensa el jefe de la División Antidrogas de la Policía Federal, Ramón Pequeño.
Méndez Santiago, de 35 años, fue detenido el lunes en el municipio de Villa de Etla, en Oaxaca (sur del país), en compañía de Carlos Alejandro Rodríguez Zepeda, de 38 años, uno de sus presuntos escoltas.
Ambos fueron puestos a disposición de la fiscalía federal.
La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal considera que «El Amarillo» era el coordinador de Los Zetas en el sur y sureste de México, en los estados de Oaxaca, Chiapas y Veracruz, Campeche y Quintana Roo y tenía su centro de operaciones en la ciudad de Oaxaca.
Pequeño señaló que el detenido era «encargado de controlar el tráfico de indocumentados provenientes de Centro y Sudamérica, mismos que trasladaba hacia los estados de Nuevo León y Tamaulipas», en el norte de México.
Los Zetas, una organización criminal liderada por el prófugo Heriberto Lazcano Lazcano, alias «El Lazca», son los presuntos responsables del homicidio de 72 inmigrantes indocumentados, la mayoría centroamericanos, en Tamaulipas en agosto pasado.
Esa organización nació como brazo armado del cártel del Golfo, pero después se independizó a principios de 2010 y declaró la guerra a sus antiguos jefes.