La caída de ceniza proveniente del volcán Tungurahua, ubicado a 135 kilómetros de Quito, afectó a las plantaciones y al alimento del ganado de las poblaciones aledañas al coloso, que están en alerta naranja desde el martes pasado.
El volcán emitió este martes columnas de ceniza que alcanzaron alrededor los 8 kilómetros sobre el nivel del cráter del volcán ubicado en la sierra centro del Ecuador, según los reportes del Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG).
El IG aseguró que los vientos dirigieron la nube de ceniza hacia el occidente y nor-occidente, razón por la cual se han reportado constantes caídas de ceniza en las poblaciones ubicadas en esta dirección.
El polvo volcánico proveniente del Tungurahua cayó sobre las poblaciones de Baños y parroquias: Baños, Juive y Runtún; en las parroquias de Pelileo: Cusúa, Pelileo, Cotaló, Chacauco, Pillate y San Juan.
Asimismo, la ciudad de Penipe, y los poblados de Bilbao, Chacauco, Choglontus, Cahuají y Manzano, Patate Guadalupe, Cevallos, Quero y de la ciudad de Riobamba fueron afectados por la caída del material volcánico.
El presidente de la Junta Parroquial de Cotaló (población de Pelileo), Juan Martínez, afirmó a Andes que en esa zona, en el noroccidente del coloso, al menos unas 720 familias están afectadas.
Martínez señaló que entre 50 y 60 hectáreas de pasto están arruinadas por la ceniza. Con esto, 1.500 cabezas de ganado de la zona estarían afectadas por la falta de alimento.
Por eso, los pobladores de Cotaló realizaron la noche del jueves un censo “rápido” para elaborar listas que serán remitidas a las autoridades del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca (Magap), para la dotación de alimento al ganado.
“Felizmente no se perdieron los cultivos porque alcanzamos a cosechar el maíz (producto insigne en la zona de la sierra centro de Ecuador)”.
El volcán Tungurahua retomó su actividad el pasado miércoles 20 de abril. Desde esa fecha se han producido emanaciones de ceniza.