La Comisión Interamericana de Derecho Humanos (CIDH), resolvió suspender la condena de muerte en contra del ecuatoriano Nelson Serrano, sentenciado en Estados Unidos por el asesinato de cuatro personas.
Dicha resolución tomada por el organismo internacional tuvo lugar debido a la aplicación de medidas cautelares que solicitó el Ministerio de Justicia, sin embargo el ecuatoriano seguirá privado de la libertad, pues los tribunales norteamericanos lo han encontrado culpable en tres instancias del asesinato de sus exsocios, George Gonsalves (69 años), Frank Dosso (35), Diane Patisso (28) y George Patisso (26), ocurrido el 3 de diciembre de 1997.
Serrano, de 73 años, se encuentra desde 2007 en el corredor de la muerte de la prisión Jacksonville, en el estado de Florida, e iba a ser ejecutado el pasado 12 de septiembre de 2011.
Con el pronunciamiento de la CIDH, emitido el 15 de diciembre de 2011, los Estados Unidos tienen la obligación de respetar el derecho a la vida de Serrano y la dignidad humana.
María del Carmen Jácome, subsecretaria de Derechos Humanos, explicó que este logro permite que el ecuatoriano, naturalizado estadounidense, reciba visitas y los chequeos médicos que requiere con urgencia, ya que su estado de salud se ha agravado por su avanzada edad, además, su diabetes le desencadenó un ceguera.
En 2005, la CIDH conoció este caso ante la denuncia de que Serrano fue ilegalmente deportado del país el 31 de agosto de 2002, por el detective de la Florida Tommy Ray y la ayuda de la Policía Nacional.