La fiscalía del Guayas continúa su recorrido en las clínicas que Roberto Quimí estuvo antes de fallecer la madrugada del viernes 27 de abril. Quimí, de 23 años, recorrió nueve centros de salud en los que le dijeron que no había cama ni lugar para atenderlo.
«Hemos señalado que al joven Quimí tenía que habérsele dado la atención en el Hospital de Guayaquil y en el Hospital de la Policía y la clínica San Gabriel no tenía terapia intensiva» indicó una de las autoridades que clausuró la casa de salud.
La clínica San Gabriel recibió la visita de la fiscalía en la que se halló medicina caducada en el quirófano, además de no tener el control sanitario por la autoridad sanitaria nacional para su funcionamiento. La clausura se dió por el incumplimiento con los artículos 130 y 170 de la Ley Orgánica de salud como medida preventiva.