No habrá consulta popular para evitar la explotación del Yasuní. Así lo evidenció ayer, Domingo Paredes, presidente del Consejo Nacional Electoral (CNE) tras anunciar que solo 359 761 firmas fueron aprobadas de las 584 mil rúbricas necesarias para impulsar la consulta popular que deje bajo tierra el petróleo del bloque 43, en el Yasuní.
Paredes dijo que de las 599 103 firmas, solo 359 761 son válidas. Es decir, fueron rechazadas 239 342 registros que presuntamente presentaron inconsistencias en el proceso de verificación.
Frente a esto Patricio Chávez, vocero del colectivo Yasunidos, dijo que la declaración del presidente del CNE no le sorprende al grupo, aunque sí la rueda de prensa convocada. «Paredes ya tomó partido, incluso antes de entregar las firmas, por la explotación petrolera del Yasuní».
Chávez enfatizó que este organismo debía arbitrar este proceso para que sea transparente, demócratico e inclusivo. Sin embargo, no los dejaron ingresar al centro de mando en igualdad de condiciones que los verificadores del CNE. «Ante este proceso ilegítimo y no democrático decidimos abandonar y no dar aval al proceso de verificación», añadió.
Según el CNE, las inconsistencias de las firmas del colectivo irían desde la rúbrica de personajes famosos, la repitición de las firmas hasta nueve veces en los formularios y la presencia de gráficos en lugar de firmas.
El grafólogo Carlos Echeverría, dijo que en los formularios se encontraron notas musicales, caritas felices y rúbricas en otro idioma.
Después de la intervención del funcionario, Paúl Salazar, vicepresidente del CNE, dictaminó: «no engañen al pueblo Yasunidos. Esto no es un juego, esto es un proceso serio».
Además, no descartó la posibilidad de analizar sanciones por las irregularidades encontradas en las firmas de los Yasunidos.
El pronunciamiento del CNE se dio antes de que el pleno de este organismo resuelva la pertinencia de la consulta popular. Hoy se espera que los cinco vocales se reunan para dictar su resolución, tras conocer el informe técnico y jurídico de las firmas.
Para hoy, los miembros del colectivo Yasunidos convocaron una concentración masiva en los exteriores del CNE. El objetivo es presentar una queja sobre el proceso de revisión de formularios y la verificación de las firmas. Desde las 14:00 artistas, zanqueros y activistas defenderán sus rúbricas, así lo anunció el vocero del colectivo en rueda de prensa.
Esta iniciativa también se reproducirá en las ciudades de Cuenca, Guayaquil, Tulcán, Ibarra, Machala, entre otras.
Ellos solicitan que el CNE publique las firmas escaneadas para confirmar con su base de datos digital. «Queremos que sea la ciudadanía quien verifique si es que sus firmas son válidas o inválidas- dijo Chávez- que el CNE se atreva a defender de la democracia si todavía tiene algo de su misión».
Tras la notificación de las firmas, los representantes del colectivo apelarán el dictamen del CNE en el Tribunal Contencioso Electoral, en la Corte Constitucional y si es necesario llevarán el caso a la Corte Internacional.
Frente este posible escenario Paredes se anticipó y dijo que si Yasunidos amenaza con llevar el caso a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) «que así lo hagan, nos veremos allá con las pruebas».
El colectivo Yasunidos entregó el pasado 12 de abril 750 mil firmas para impulsar una consulta popular sobre el Yasuní. El colectivo Yasuní Sí, de los alcaldes de la Amazonía que apoyan la explotación del bloque y el Frente de la Defensa de la Amazonía que quiere que Ecuador sea un país libre de extracción petrolera también entregaron firmas. El CNE aún no se ha pronunciado sobre el proceso que impulsa el colectivo Yasuní Sí.