Los padres de la ecuatoriana Yanela Zaruma, cuya expareja ha confesado ser el autor de su muerte, participaron hoy junto a representantes de diferentes instituciones en una concentración silenciosa de condena en la ciudad española de Pamplona (norte).
En la concentración, a la que asistieron familiares y amigos de la joven, cuyo cadáver fue encontrado el pasado 4 de abril en una balsa de Beriáin (Navarra, norte español), los participantes portaron pancartas en las que podía leerse «Ante el machismo no cabe el silencio» y «Pedimos justicia».
La víctima, de 22 años, y el imputado, identificado por las iniciales de su nombre como E.R.G.LL., de 24 y también ecuatoriano, habían mantenido una relación de pareja y tenían una hija de tres años.
El hombre se encuentra en prisión tras ser detenido y confesar la autoría del crimen.
A la concentración, convocada por el Instituto Navarro para la Igualdad, asistieron los padres de la víctima, quienes, según la responsable de Asuntos Sociales de la región, Maribel García, están «destrozados y muy confundidos» por una «situación que les supera totalmente» y piden «tranquilidad y tiempo para asumir la terrible situación».
Añadió que «siempre que la familia entienda que debe ser así», el Instituto para la Igualdad se personará como acusación popular en el juicio.
En cuanto a la hija de la pareja, de 3 años, indicó que «está bien, no sabe nada de la situación» y en estos momentos se encuentra con sus abuelos maternos, que van a solicitar su custodia.
El departamento de Asuntos Sociales ya ha elaborado un informe al respecto en el que apunta que «no hay inconveniente».
La noche del 3 al 4 de abril, según el auto judicial, el detenido estranguló a Yanela Zaruma y, posteriormente, trasladó su cadáver hasta una balsa de Beriáin.