Desde las 09h45, alrededor de unos 15 policías empezaron a arribar hacia los exteriores del colegio Mejía con el fin de brindar seguridad a los padres de familia que permanecen tomados las instalaciones de este centro educativo desde el lunes pasado, cuando aún está en suspenso el nuevo proceso de inscripción para los octavos años de educación básica.