Tras la resolución del Concejo Cantonal, que dio paso al endeudamiento de $ 51 millones para la construcción del Tranvía, la Municipalidad de Cuenca debe tener contratadas todas las obras hasta el 31 de enero de este año.
Para mediados de febrero, la obra del Tranvía debe entrar en construcción; para eso también se gestiona adquirir un terreno en el viejo sector del ex CREA, donde se levantará un lugar destinado a los equipos de movilidad del Tranvía.
Paúl Granda, alcalde de la ciudad, explicó que el costo asciende a $ 232 millones, de los cuales $ 147 millones corresponden a las transferencias que hará el Gobierno a la Municipalidad, a través del acuerdo firmado el 3 de noviembre de 2012.
En cuanto a los $ 51 millones que asumirá el Municipio, dijo que estos recursos serán devueltos al Gobierno Nacional a partir de 2019, con una tasa de interés del cero por ciento y un plazo de 15 años, incluido un tiempo de gracia de 5,5 años.
Para el concejal Carlos Orellana existe una propuesta para bajar los costos de endeudamiento, los mismos que se enfocan a que los terrenos que han sido entregados al Gobierno para construcción de Unidades de Policía Comunitaria y otras obras pasen como parte del pago a la deuda que contraerá el Municipio.
No obstante, para el 2019 con el Tranvía “tendríamos un endeudamiento bajo que bordeará los 7 millones de dólares, que nos permitiría hacer otras inversiones en obras de carácter general”, dijo el alcalde.
Señaló que el tranvía Cuatro Ríos entrará en fase de prueba a finales de 2014 y operará completamente en la ciudad a inicios de 2015.
Los consejos barriales de Cuenca respaldaron de manera unánime el proyecto. César Loja, Alejo Soria y Eulalia Cobos, en representación de la Asamblea Ciudadana de los consejos barriales de Cuenca, participaron en la sesión de Concejo, ocupando la silla vacía, y respaldaron con voz y voto la estructura de financiamiento para este proyecto.
“A través de la silla vacía fuimos parte de la decisión histórica que marca la diferencia entre un antes de movilidad caótica ‘sin frenos’ y un después con un transporte digno y de última tecnología como lo es el Tranvía”, expresó César Loja, coordinador parroquial de El Batán, tras aclarar que este sistema de transporte es único en Latinoamérica y se convertirá además en un atractivo que hace de Cuenca un polo de desarrollo y ejemplo regional.
César Loja cuestionó la “irresponsable y ligera” decisión de los concejales Tarquino Orellana, ángel Montero y Jaime Moreno, quienes votaron en la referida sesión en contra del Tranvía, y subrayó que ellos como representantes del cantón no deben oponerse a proyectos de envergadura para la ciudad, atendiendo únicamente a intereses personales y cálculos partidistas.
El dirigente barrial analizó que la recaudación responsable de impuestos a nivel local y nacional se devuelve con obras de interés social, como lo es el Tranvía.