Corea del Norte anunció este martes que reanudará las operaciones del reactor nuclear de Yongbyon, que había sido desactivado en 2007 tras un acuerdo de desnuclearización.
Un vocero del sector energético dijo a la agencia oficial de noticias norcoreana KCNA que las autoridades iniciaron un proceso de «reajuste y reactivación» de las instalaciones en dicho complejo nuclear, que incluye una planta de enriquecimiento de uranio y un reactor de cinco megavatios.
Pyongyang explicó que la medida forma parte de los esfuerzos para resolver la endémica escasez de suministro eléctrico del país, aunque también servirá para «impulsar la fuerza armada nuclear tanto en cantidad como en calidad».
La obra se pondría en marcha sin demora, según el comunicado oficial.
El gobierno norcoreano había cerrado la planta de Yongbyon en julio de 2007 como parte de un plan de desarme para recibir ayuda internacional. Poco más tarde las autoridades locales incluso inutilizaron la torre de enfriamiento.
Este proceso de diálogo se halla, sin embargo, estancado desde 2008, cuando Pyongyang se retiró tras recibir sanciones de la ONU por efectuar pruebas con misiles de largo alcance, y desde entonces los diversos intentos de retomar las negociaciones por parte de los países implicados han concluido en fracaso.
Al margen del reactor, otra instalación clave del complejo nuclear de Yongbyon es la planta de enriquecimiento de uranio, que Corea del Norte mostró abiertamente en 2010 al experto estadounidense Siegfried Hecker y donde permanecían operativas unas 2.000 centrifugadoras.
En ese momento, aseguró que la iniciativa tenía como único fin la producción de energía eléctrica para uso civil.
No existen pruebas de que Corea del Norte sea capaz de fabricar bombas nucleares con uranio ya que su aplicación requiere tecnología mucho más avanzada que en el caso del plutonio, aunque ciertos observadores barajan que Pyongyang podría haberlo logrado en su tercera prueba atómica de febrero.