El presidente Rafael Correa criticó ayer a los periodistas que sirvieron como informantes a la Embajada de Estados Unidos en Quito.
El Mandatario hizo estas declaraciones durante el enlace ciudadano ofrecido desde Cascales, en Sucumbíos. En el segmento “La libertad de expresión ya es de todos”, se mostró un vídeo que recoge el reportaje publicado por El Telégrafo sobre los cables diplomáticos norteamericanos y que fueron filtrados por WikiLeaks.
En las imágenes se hace mención a que la prensa privada recogió los cables y destacó el escándalo de Jaime Hurtado Vaca, ex comandante general de la Policía Nacional.
Las denuncias de corrupción hechas contra el uniformado fueron desvirtuadas por las autoridades, el año pasado. Enseguida se leyeron párrafos del reportaje de El Telégrafo donde se cita a Alfredo Negrete, ex presidente de la Asociación Ecuatoriana de Editores de Periódicos (Aedep); César Ricaurte, director de Fundamedios, y a los periodistas Carlos Jijón y Jorge Ortiz. Todos ellos son calificados en el cable como “contactos” y “fuentes confiables” de la sede diplomática norteamericana. “¡Qué vergüenza!”, dijo Correa ante sus seguidores.
El Mandatario agregó que esta situación será desvirtuada por los comunicadores antes citados. “Buscarán la quinta pata al gato, dirán que se los insulta”, reclamó.
Luego el gobernante se preguntó si es justificación ser crítico del Ejecutivo para ir a reclamar a la Embajada de un país. “¿Quién iría a quejarse a una embajada extranjera?”, se cuestionó el Jefe de Estado.
“Sepan que cuando lean La República están leyendo al vocero de Washington”, advirtió Correa en relación a que Ortiz y Jijón trabajan en ese medio electrónico.
Además aclaró que no se trata de defensa de derechos humanos ni reclamos simples porque el cable los califica como “contactos” e “informantes”.
Asimismo, el Mandatario criticó que este cable no haya sido recogido por los otros medios de comunicación, como sí ocurrió con el escándalo que involucró al general Hurtado Vaca. Por eso volvió a llamar a la prensa “negocio privado de la comunicación”. “Doce familias manejan la información” en el país, lamentó el Presidente. Por eso dijo que este asunto es uno de los principales problemas de Latinoamérica y, en general, del mundo.
Distribuidora nacional
En otro tema, Correa confirmó que el asunto del contrabando de gas en la frontera y la escasez del combustible en Sucumbíos fue uno de los puntos tratados en el gabinete.
En ese sentido confirmó la decisión gubernamental de crear una distribuidora nacional y pública para eliminar a los privados. Puso como ejemplo lo que se realiza con las gasolineras en las provincias fronterizas.
Correa dejó en claro que no tolerará el contrabando del combustible debido a que el subsidio al gas es un esfuerzo del pueblo ecuatoriano.
Añadió que las distribuidoras privadas han ayudado con la especulación y han preferido vender el combustible a negocios de Colombia y Perú, lo que ha ocasionado pérdidas económicas.