Si no es Julian Assange, es el Yasuní ITT. Si no son los dos anteriores, es la crisis económica mundial. Lo cierto es que Rafael Correa, en Europa, hace más noticia que muchos de sus colegas de América Latina. En solo dos días el presidente ecuatoriano fue entrevistado por más de 10 medios de comunicación de Italia y España, durante su visita para participar en la Cumbre Iberoamericana realizada en Cádiz. Adicionalmente, ecuatorianos radicados en esos países y ciudadanos locales llenaron coliseos.
Correa, a diferencia de otros mandatarios presentes en la Cumbre, se metió de lleno en la crisis económica española, sobre todo por el impacto que tiene en la comunidad ecuatoriana. Eso le valió la atención mediática y de líderes sociales y políticos. En concreto señaló las causas estructurales de la crisis y cómo pudo ser evitada si se seguía el ejemplo latinoamericano.
Cada medio abarcó diferentes temas; por ejemplo, diario El País abordó al Mandatario con preguntas sobre la situación de los migrantes en España y su relación con los medios de comunicación. Mientras que el Grupo Vocento -que tiene entre sus productos periódicos, programas en radio y televisión, revistas y medios on line- centró su atención en la propuesta para la conservación del Yasuní, por ser novedosa. Otro tema es el asilo político que hace más de cinco meses Correa concedió a Julian Assange.
Como resultado de las diferentes intervenciones de Correa en varias localidades europeas, editorialistas han concluido que es valiente y acertada la postura del Mandatario latinoamericano, como lo explicó Adolfo Ferrera en el portal elmercuriodigital.es.
La reflexión del Mandatario tiene como eje principal la prevalencia del ser humano sobre el capital, concepto que maneja en su política de Gobierno. “En torno a estas ideas difundidas por el presidente Correa debería girar todo el debate acerca de la crisis y su solución, su alternativa. Todo lo que sea salirse de esta línea es hacerle el juego al capital financiero y a sus medios de comunicación, y alargar nuestra agonía como sociedad”, destacó Ferrera.
Correa fue reiterativo y enfático en destacar que lo que viven los europeos ya lo sufrimos los latinoamericanos y que debieron aprender de esa experiencia para “no repetir los mismos errores”. Por eso recordó la crisis de la deuda externa que sufrió América Latina en la década de los 90 y que para Ecuador supuso “la mayor confiscación de dinero” de su historia, debido a los elevados intereses que pagaba.
El líder ecuatoriano comparó estos hechos con la actual crisis en Europa. “Las políticas de austeridad que afectan a la mayoría y solo benefician a pocos, la deuda pública es en parte ficticia, porque los acreedores son los bancos centrales. La historia se repite ahora en Europa”, dijo Correa al pedir a los europeos que no cometan los mismos errores de los latinoamericanos: acumular deudas con elevados intereses.
Correa es uno de los mandatarios más activos en las redes sociales, donde también tiene liderazgo, pues tiene miles de seguidores entre los que constan varias organizaciones sociales internacionales. De hecho, para algunos, desplazó el protagonismo de Hugo Chávez.