El presidente de Ecuador, Rafael Correa, podrá abandonar el hospital en dos o tres días, después de que el pasado lunes fuera operado de su rodilla derecha, en la que le colocaron una prótesis total, ínformó hoy el médico Julio Yépez.
«Básicamente consideramos que dentro de las próximas 48 ó 72 horas» el paciente «puede salir del hospital», explicó en una rueda de prensa Yépez, médico clínico a cargo de la salud de Correa.
El jefe de Estado apareció hoy públicamente en la terraza del hospital y desde allí, con buen semblante, saludó a transeúntes y fue captado por las cámaras de televisión.
El vicepresidente, Lenín Moreno, quien visitó a Correa en el hospital, en Quito, comentó a la prensa que le iba «a halar la oreja» (reprender) porque lo vio caminando, pero luego se enteró de que el mismo médico le había recomendado hacerlo.
«Estaba caminando con un andador y me enseñó todo lo que le habían sacado: pedazos bastante grandes de la tibia, la rótula que, entiendo, se han colocado ahora con técnica de punta de la medicina moderna, de titanio», indicó.
Pablo Ramos, médico que operó a Correa, indicó hoy que el jefe de Estado se encuentra en «excelentes condiciones» y con mucho ánimo para su recuperación.
El jefe de Estado es sometido a un proceso diario de fisioterapia. Yépez indicó que esas sesiones podrían terminar en un máximo de dos meses, pues «es un tiempo que se estipula razonable para que camine y haga su reactivación completa».
El galeno comentó que en los primeros cinco u ocho días tras la operación, Correa deberá utilizar un andador «más por seguridad», tras lo cual deberá apoyarse en un bastón.