Más de 7.200 personas siguen hoy evacuadas por el temporal de lluvias que azotó la semana pasada la región central de Cuba y que provocó dos fallecidos y derrumbes en más de mil viviendas entre otros daños.
Según informan hoy medios oficiales cubanos, tras remitir las lluvias los trabajos de recuperación se centran en restablecer las infraestructuras viales y energéticas en la provincia de Sancti Spíritus (a unos 350 kilómetros al este de La Habana) que fue la más castigada por el temporal.
Allí unos cuarenta kilómetros de carreteras principales así como diez puentes han resultado dañados, lo que ha causado el aislamiento de varios núcleos rurales y problemas en el tránsito y transporte.
El temporal, que fue especialmente intenso entre los pasados días 23 y el 25 de mayo, obligó a evacuaciones masivas y dejó derrumbes en 1.156 casas, daños en 1.356 hectáreas de cultivos agrícolas y más de 400 interrupciones al servicio eléctrico.
Dos hombres -un ciudadano cubano y otro francés- fallecieron a consecuencia de las lluvias cuando trataban de cruzar ríos crecidos.
Las precipitaciones registradas estos últimos días en la provincia de Sancti Spíritus «no tienen precedentes en la historia de la región», publicó este lunes el diario oficial Granma.
La Agencia de Información Nacional (AIN) señala que estas lluvias «triplicaron la media histórica para un mes de mayo» y «son las mayores de los últimos 80 años para ese período» según datos de la Delegación Provincial de Recursos Hidráulicos.